El culebrón de la oferta del magnate Mikhail Fridman, propietario del fondo LetterOne, por DIA ha terminado. Este lunes se ha cerrado el período de aceptación de la OPA y la CNMV emitirá un comunicado en los próximos días desvelando cuántos accionistas de la cadena han aceptado los 0,67 euros por acción de Fridman. Pero ya hay un selecto grupo de inversores que han ganado.
El fondo irlandés BG Master, Emmanuel Boussard (uno de los fundadores de la firma de inversión francesa Boussard & Gavaudan Partners), el fondo británico Melqart Asset Management, Ibercaja y The Bank of Nova Scotia han 'pescado' más de 5 millones de euros en menos de dos meses con la incertidumbre de la OPA de Fridman.
La mayoría de estos fondos entraron en el capital cuando el mercado desconfiaba de la OPA y las acciones cotizaban por debajo de los 0,67 euros. Ese fue el caso de BG Master. El fondo irlandés afloró hasta el 3,1% del capital el pasado 25 de abril, una jornada que DIA cerraba en 0,57 euros por acción. Las acciones de la compañía acumulaba tres jornadas seguidas perdiendo un 3%.
BG Master aprovechó los rumores de fracaso del plan de Fridman y las ampliaciones del plazo de aceptación para comprar 19,6 millones de acciones por un valor aproximado de 11,1 millones de euros. Ahora, al cierre de la OPA y en menos de un mes, este paquete accionarial vale dos millones de euros más.
Pero BG Master no ha saciado en este período. El fondo irlandés ha ido comprando acciones, jornada tras jornada, y días antes de que terminara la OPA, hasta alcanzar el 4,1% de la compañía que tiene un valor de mercado de 16,8 millones de euros.
Un ex de Goldman
Emmanuel Boussard también ha visto una oportunidad en las dudas sobre LetterOne. El cofundador de la firma de inversión francesa Boussard & Gavaudan Partners y ex de Goldman Sachs es dueño del 5,3% de la cadena de supermercados. El inversor francés registró su primera posición en la CNMV, un 3,6%, el pasado 5 de abril con las acciones de DIA en 0,65 euros.
El inversor francés tomó esta posición en DIA con un 2,3% a través de acciones directas y un 1,3% a través de un instrumento financiero conocido como son los CFD (contrato por diferencia). Sus acciones valen ahora 0,5 millones de euros más en menos de un mes. Boussard, al igual que BG Master, ha aumentado su participación en las últimas semanas de la OPA y su paquete accionarial, ya sin CFDs, tiene un valor de mercado de 20,5 millones de euros.
Uno de los movimientos más destacados en este proceso ha sido el de Melqart Asset Management, uno de los inversores que apostaba por las caídas de DIA hasta principios de marzo. Este fondo contaba con una posición corta del 2,4% cuando Fridman lanzó su OPA, desde entonces, fue recortando esta inversión bajista. Tras cerrar su posición en corto, Melqart compró a final de abril un 3% del capital de DIA a través de un CFD. Un paquete accionarial que, gracias al éxito final de la OPA de Fridman, ha aumentado su valor en 1,2 millones.
Gestoras de bancos
La gestora de fondos de Ibercaja registró en la CNMV un 1% de DIA el 18 de abril. Las acciones de la cadena de supermercados cotizaban por entonces en 0,65 euros. La subida hasta el precio de la OPA ha permitido que la gestora, que tiene esta posición con un plan de pensiones y el fondo de pensionistas de Endesa, gane 0,2 millones en menos de dos semanas.
Otro bancos que ha sabido aprovechar la oportunidad que daba Fridman ha sido Bank of Nova Scotia. La entidad escocesas compró un 1,7% dos meses después de que LetterOne lanzase su envite. Al cierre de esta OPA, su accionariado vale 0,2 millones de euros más de los 6,7 millones que pagó en abril.
En el caso de la familia Bontoux (ex socios de Carrefour), dueño del 3,2% de DIA, que registró su participación individual el pasado 2 de abril por valor de 13 millones de euros. Su participación ha aumentado su valor en 0,4 millones de euros desde que la CNMV puso la alfombra roja a la OPA de Fridman, una decisión del organismo que el propio fondo de Bontoux ha criticado públicamente.