La agencia Fitch ha rebajado este martes las calificaciones crediticias de Bankia, BMN, Liberbank, el Grupo Cooperativo Caja Mar y el Banco Popular, con lo que considera la deuda de todas estas entidades dentro del "bono basura". Aún así, existen diferencias entre ellas, pues Bankia es la que mejor nota tiene, "BB+", a un escalón del aprobado raspado además de que cuenta con una perspectiva positiva, seguida de BMN y Liberbank, con "BB".
Por debajo, con "BB-", quedan ya el Grupo Cooperativo Cajamar y el Banco Popular, la única entidad de las cinco degradadas que sufre un recorte de dos peldaños, aunque ahora su visión sobre la entidad ya es positiva. Fitch justifica los recortes por su idea de que hace tiempo que se redujo la probabilidad de que haya más ayudas públicas a los bancos en Europa, Estados Unidos y Suiza y a pesar de que reconoce que el sector bancario español continúa recuperándose apoyado por la mejora de las tendencias macroeconómicas.
La agencia cree que el PIB de España avanzará este año un 2,5 % y un 2,3 % en 2016, así que esa mejora económica debería contribuir a la calidad de los activos de los bancos y a la reducción de las necesidades de aprovisionamiento. Sin embargo, sigue detectando riesgos para los bancos españoles como una tasa de desempleo que continúa siendo alta y un mercado inmobiliario que sigue "deprimido", a pesar de algunas recientes señales de mejoría; y ello, advierte, dificulta una recuperación económica más significativa. Además, Fitch también espera que los ingresos de los bancos sigan siendo moderados en un entorno de bajos tipos de interés que sólo se verán parcialmente compensados por los menores costes de financiación.