Caja de Ingenieros ha lanzado un nuevo fondo de inversión global centrado en el respeto al medio ambiente y el cumplimiento de los objetivos de COP21 en materia de emisiones de efecto invernadero. CI Environment ISR tiene un universo de inversión formado por aquellas empresas que invierten en negocios con soluciones ante los retos y oportunidades del cambio climático, a la vez que generan valor desde la óptica financiera tradicional. Entre otros, el uso de las energías renovables, la eficiencia energética, la reducción de los residuos o la innovación tecnológica.
Con el fin de cumplir con estos objetivos, el fondo utiliza, entre otras métricas, el cálculo de la huella de carbono para medir la totalidad de gases de efecto invernadero emitidos por efecto directo o indirecto de cada una de las inversiones. Para ello, hace uso del ratio intensidad de carbono, que calcula el volumen de toneladas de CO2 en relación a la cifra de negocio.
"Este fondo es una apuesta más de nuestro compromiso con el medioambiente. Creemos que también desde el ámbito de la inversión financiera se puede contribuir a mejorar la sociedad en la que vivimos, a la vez que ofrecemos una propuesta de inversión interesante para las personas e instituciones", dice Joan Cavallé, director general del grupo Caja de Ingenieros. "El avance del concepto sostenibilidad en las finanzas, en la medida que éstas adoptan una visión integral sobre la economía global, pone en valor los beneficios que supone tanto a nivel individual como colectivo", añade.
La importancia que está adquiriendo la lucha contra el cambio climático en las empresas se demuestra en un reciente estudio de BlackRock. "Las empresas más sensibles al cambio climático son las que obtienen un mayor retorno. Por ejemplo, analizando los últimos cuatro años, de las empresas que redujeron más su intensidad de carbono del índice MSCI World experimentaron una rentabilidad promedio superior al 4% en relación al índice", señala Xavier Fàbregas, director general de Caja Ingenieros Gestión, quien destaca la importancia de aplicar los criterios extrafinancieros en el análisis tradicional de las inversiones.