El ahorro financiero de las familias españolas ha alcanzado un nuevo máximo histórico y permite al Gobierno enfilar las vacaciones con datos casi de ensueño, ya que a esto hay que unirle la fuerte caída del paro conocida ayer.
Conforme datos de Inverco, “el ahorro financiero neto de las familias (activos-pasivos) alcanzó un nuevo máximo histórico, y se situó en 1,07 billones de euros, lo que supone un incremento del 4,0% sólo en los tres primeros meses del año”.
Fuente Inverco
Esa es la parte positiva. La no tan buena es que en términos netos no ha habido crecimiento: “A ello ha contribuido el aumento de valor de los activos financieros, así como la disminución de 11.248 millones de euros de los pasivos financieros, que mantienen un ritmo de contracción interanual cercano al 6%. En marzo 2014, el volumen de pasivos de las familias españolas se situaba en el 81,7% del PIB (muy inferior al registrado a finales de 2006)”.
Es decir, si las familias no consiguen incrementar su ahorro, al menos están recortando deudas.
Fuente Inverco
Dos segmentos son los protagonistas: los fondos de inversión, con un crecimiento de 7.000 millones de euros en el primer trimestre, frente a la caída de los depósitos, que se dejan 8.000.
Fuera de depósitos
La incipiente salida de depósitos ya fue adelantada por Vozpópuli y es llamativa no tanto por el tamaño (los depósitos siguen siendo el 45% del ahorro familiar) sino porque por primera vez en muchos años hay fuga de las cuentas bancarias.
Por cierto, las sicavs suponen ya un 1% del total del ahorro español.
Inverco destaca que en términos porcentuales sobre PIB, el ahorro financiero neto de las familias españolas alcanza el 104,9%, frente al 102,2% en el año 2006 y 68,5% en 2008, por lo que el efecto de la crisis en la riqueza financiera de las familias ha sido totalmente neutralizado. No ocurre lo mismo con la riqueza inmobiliaria de los hogares, que pasó de representar el 546% del PIB en 2006 a tan sólo el 415% del PIB en diciembre 2013 (último dato disponible).
