Los fondos de pensiones viven un momento dulce. La revalorización de los mercados de los últimos años ha ayudado a que alcancen un récord de activos bajo gestión. A finales de septiembre, el conjunto de fondos de pensiones había alcanzado un volumen patrimonial de 96.892 millones de euros, un 4,5% más que a principios de año. Una cifra que deja atrás los 85.834 millones con que cerraron el año 2007, situándose de esta forma en su máximo histórico, según los últimos datos de Inverco.
El buen comportamiento de los mercados bursátiles y de los títulos de renta fija explican este crecimiento patrimonial a pesar de que las aportaciones netas, la diferencia entre lo que ingresan los partícipes y las prestaciones que deben afrontar los planes, han ido disminuyendo desde el inicio de la crisis, situándose en 233 millones de euros en 2013, cuando hace siete años ascendían a 3.091 millones de euros.
De hecho, las prestaciones por supuestos especiales de liquidez (enfermedad grave y desempleo de larga duración) se han ido incrementando año a año desde el inicio de la crisis, hasta alcanzar los 500 millones de euros a finales del año pasado desde los 60 millones del año 2007.
Esta cifra de volumen patrimonial, no obstante, sigue siendo sensiblemente inferior a las manejadas en otros países, sobre todo por la alta tasa de sustitución respecto al último salario de la pensión pública en España.
Tanto los fondos del sistema individual como los de empleo han visto evolucionar su volumen de activos bajo gestión durante los últimos años. Los primeros cerraron septiembre con 61.850 millones de euros, de los que la tercera parte se encuentra concentrados en planes garantizados, una categoría que ha experimentado un crecimiento meteórico desde el año 2007, cuando gestionaban 8.581 millones. Los fondos de renta fija, tanto a corto plazo como los de duración, también han experimentado un aumento sustancial, llegando a sumar entre ambos 16.816 millones a finales del mes pasado.
Los fondos de renta variable y los mixtos han sido los que han sufrido mayores salidas de dinero hacia categorías que los ahorradores consideran más seguras, y de esta forma su patrimonio bajo gestión ha ido disminuyendo paulatinamente durante estos años hasta situarse en 6.476 millones de euros en el caso de los fondos de bolsa y en 18.519 millones en el caso de los mixtos.
De éstos, en los de renta fija sí se ha dejado notar con mayor intensidad la pérdida de atractivo para los ahorradores, que han reducido su exposición desde los 21.000 millones que tenían depositados en el año 2007 hasta los 12.670 millones de finales de septiembre de este año.
Durante estos nueve meses de 2014, los fondos de pensiones de renta variable del sistema individual han sido los que han acaparado mayores aportaciones netas, por valor de 90,5 millones de euros, seguidos de los mixtos de bolsa, con 51,4 millones.
Los fondos de pensiones de renta fija a largo plazo, con 70,3 millones de euros, han sido los terceros en captaciones netas, mientras que los de deuda a corto plazo, con salidas netas de 260 millones, han sido los que han concentrado mayores reembolsos, seguidos de los fondos de pensiones mixtos de renta fija, con casi 90 millones, y los garantizados, con 69 millones.