La ministra española de Transición Ecológica, Teresa Ribera, pidió este jueves un esfuerzo a las compañías petroleras para rebajar el precio de los carburantes, junto al que se va a hacer en las cuentas públicas, porque considera que tienen margen. "En una situación tan complicada no puede haber solo un esfuerzo del consumidor, del contribuyente. Debe haber un esfuerzo también por parte de las empresas que están en posición de hacerlo", afirmó en declaraciones a la prensa en París, donde participa en la reunión de ministros de la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Preguntada sobre cuál es la posición de esa demanda de las compañías petroleras con las que el Ejecutivo mantuvo un encuentro el pasado martes, respondió: "Yo creo que lo entienden". Es más, recordó que una de ellas ya había anunciado una campaña de descuentos e insistió en que a su parecer "tienen margen" para acompañar la rebaja de precios de los carburantes que prepara el Ejecutivo porque "entienden que la situación es complicada". "En estos momentos -repitió- sienten que hay una gran preocupación y que el primer esfuerzo tiene que ser por parte del presupuesto público pero no puede basarse únicamente en un esfuerzo unilateral del presupuesto público, sino que tiene que haber también un esfuerzo de reducción de márgenes, de beneficios del sector".
El Gobierno está preparando un paquete de medidas para contrarrestar la escalada de los precios de los carburantes y de la electricidad que se debe aprobar en el Consejo de Ministros del próximo día 29 para una aplicación "con efectos inmediatos", aunque alguna medida por razones técnicas pueda necesitar un poco más de tiempo, precisó.
Eléctricas
En cuanto a los esfuerzos que se está pidiendo a las eléctricas, la vicepresidenta tercera indicó que se les está pidiendo en primer lugar "a través de la regulación con las contribuciones que hacen y que quizás haya que ampliar para la cobertura del bono social". También renunciando a una revisión al alza de las tarifas de los clientes industriales y domésticos para repercutir el fuerte incremento de los precios del gas o con una subida "muy moderada". Otra posible contribución de las eléctricas sería con el adelanto de las liquidaciones por la generación con renovables de primera generación. Modificar el sistema de fijación de precios de la electricidad es una de las prioridades del Gobierno español para la cumbre europea que se celebra este jueves y viernes en Bruselas, pero la propuesta de Madrid y Lisboa para establecer un tope al precio del gas que se repercute en el del kilovatio choca con algunos países del norte, como Alemania.
Consejo Europeo
Ribera reconoció que "va a ser un Consejo Europeo complicado, intenso" y defendió la idea de que si no hay consenso entre los Veintisiete para desacoplar los precios de la electricidad de los del gas, al menos se ofrezca una posibilidad de hacerlo a los que quieran ir por esa vía "con todas las salvaguardas de cara al intercambio de electricidad". Y a la cuestión de si España y Portugal seguirán adelante aunque no haya consenso, la vicepresidenta no quiso adelantarse y se limitó a insistir en que hay por delante dos días de cumbre e incluso "alguna hora más, si fuera necesario" para buscar el consenso. "Por tanto, es en lo que nos tenemos que centrar en este momento", concluyó.
