La ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, ha afirmado este jueves que, ante el brote de coronavirus, "la discusión presupuestaria tendrá que adaptarse a la realidad", en el sentido de que hay "una necesidad de gasto para responder a los problemas" que se van a generar en sectores como las pymes o el turismo.
Además, también ha dejado claro que "aquí nadie está hablando de bajar impuestos", sino de aprobar moratorias y aplazamientos para no "ahogar a las empresas que tienen dificultades de tesorería" por la caída de la demanda.
La ministra ha destacado que hay que combinar las medidas de corto plazo con las de medio y largo plazo, a corto plazo "medidas necesarias para no ahogar la economía" y a medio y largo plazo proseguir con "la senda de más justicia fiscal".
Impacto fiscal de las medidas
Según ha dicho, en el hecho de que los Presupuestos deben adaptarse a la realidad "el Gobierno está y va a estar unido" y es consciente de que las medidas que se tomen tendrán impacto fiscal.
Eso sí, ha dejado claro que no todas las medidas se adoptarán a través del Presupuesto español, sino que habrá una parte que vendrá por el aumento de liquidez por el Banco Central Europeo (BCE) y otra de fondos europeos a disposición de España.