Llegan los meses estivales y con ellos también los largos viajes cruzando en muchas ocasiones la península de lado a lado. Y para cubrirlos con un altísimo nivel de confort ya sea en formato dos ruedas o cuatro, las dimensiones de la moto o el turismo sin duda influyen de manera decisiva. Y tanto la K1600 GT de BMW como el revolucionario Staria de Hyundai se posicionan como los modelos más grandes en sus respectivos segmentos, abrumadores a simple vista pero brillantes una vez en ellos por el confort que transmiten.
No en vano, la nueva K1600 GT se acerca en peso a los 350 kilos, que imponen sobre todo en parado al subirnos a ello, como también lo hacen sus dimensiones, enormes sin duda para lo que es habitual en el sector de las dos ruedas. Y el también recién llegado Staria, una de las últimas sorpresas de Hyundai, es un atrevido monovolumen de más de 5,2 metros de largo con un diseño sin duda que no pasa desapercibido y con un interior como si de las plazas de 'business class' de un avión se tratara.
BMW K1600 GT
BMW ha reforzado el buque insignia de sus modelos de dos ruedas, la K 1600 GT, con algunas mejoras de equipamiento que la dejan como una de las motos de turismo más lujosas y confortables del mercado. Entre ellas, el motor de seis cilindros en línea ha sido revisado para cumplir con la normativa de emisiones Euro 5 con una nueva gestión del motor, mantiene los 160 CV de potencia pero ahora a 6.750 rpm en lugar de 7.750, mejorado levemente el par máximo.
Adopta suspensión electrónica dinámica ESA "Next Generation" con compensación automática de la carga de serie, nuevos faros full LED adaptativos y, en conectividad, estrena cuadro de instrumentos multifunción con pantalla TFT a color de nada menos que 10,25 pulgadas como si de un coche se tratara y numerosas funciones como la conexión ampliada para smartphones de serie.
Mejoras evidentes que se disfrutan una vez nos ponemos a los mandos de su ancho manillar, una postura muy confortable y con una altura del asiento que permite llegar con los dos pies al suelo sin demasiados problemas. Se siente pesada en parado, aunque dispone afortunadamente de marcha atrás de serie para poder manejarla sin problemas.
Eso sí, basta iniciar la marcha para que los casi 350 kilos de peso prácticamente desaparezcan transmitiendo bastante agilidad y una gran facilidad de conducción. Transmite también mucho aplomo a alta velocidad y se siente ágil en tramos de curvas de todo tipo. Es sorprendente cómo puedes entrar sin esfuerzo en cualquier tipo de curva, por cerrada que sea, aunque hay cierta tendencia a levantarse a la que acabas acostumbrándote para disfrutar sin duda en este tipo de trazados a pesar de su peso y tamaño.
Un brillante comportamiento marcado por el funcionamiento de los frenos con frenada combinada así como por las suspensiones, en especial con el inigualable Telelever delantero que es el que permite apurar frenada manteniendo la K1600 en su sitio anulando prácticamente por completo esas transiciones de hundimiento al frenar o acelerar y, por lo tanto, te transmite una seguridad y control total en todo momento.
Y a la hora de viajar, la nueva suspensión activa contribuye mucho en esas sensaciones de altísimo confort ya que cambia el tarado de forma rapidísima según las irregularidades del asfalto así como regular la base de su dureza según llevemos uno u otro modo de conducción. Flotas sobre el asfalto a cualquier ritmo, ya sea tranquilo o muy alto aprovechando la facilidad del seis cilindros para ganar velocidad en sexta prácticamente desde 40 km/h.
Un motor de funcionamiento increíble y que desde que lo pones en marcha sorprende por su sonido, pero que lo hace más aun por su refinamiento sintiendo a la vez en todo momento su poderío. Abres gas con decisión desde muy baja velocidad y notas cómo el motor entrega potencia sin transmitir ningún tipo de vibración. Y por encima de las 5.000 vueltas, cambia el sonido y entrega la potencia de una forma más directa como si de una deportiva se tratase.
Y como rutera que es, su depósito de 26 litros y unos consumos que a ritmo no especialmente bajo se mueven en torno a los 6 l/100 km de media permiten autonomía por encima de los 400 kilómetros sin que en ningún momento antes sintamos la necesidad de parar a descansar.
FICHA TÉCNICA:
Versión K 1600 GT; Motor 6 cilindros en línea; Cilindrada 1.649 cm3; Potencia máx. 160 CV a 6.750 rpm; Par máximo 180 Nm a 5.250 rpm; Transmisión Por cardan; Caja de cambios De 6 velocidades; Dimensiones 2.324 / 1.000 / 1.440 mm; Altura del asiento 810-830 mm.; Peso en seco 343 kg.; Depósito de combustible 26 litros; Vel. máxima 230 km/h; Acel. 0 a 100 km/h. 3,7 seg; Consumo en recorrido de pruebas 6,1 l/100 km; Autonomía 420 km.; Precio 29.665 euros
Hyundai Staria
Es la última, y arriesgada, apuesta de Hyundai, una marca que ganado mucho peso en el mercado español y que ya está consolidada en el top ten de las más vendidas con éxitos tan incuestionables como el del Tucson, un SUV que ha conquistado a muchos españoles. Por lo hablar de su apuesta eléctrica, con modelos como el Kona o el Ioniq 5 que pasan por ser referencias por su eficiencia y sus amplísimas autonomías.
Y de repente, da un giro y sorprende con un modelo de abrumadora presencia, un monovolumen que supera los 5,20 metros de longitud con un diseño rompedor que no pasa desapercibido y, sobre todo, un interior en el que poder viajar en esta versión de siete plazas –las hay hasta de nueve- con el confort propio de una ‘clase business’. Porque si delante hay mucho espacio y amplios asientos, las dos plazas traseras sorprenden por sus asientos reclinables con «modo relax» que permite desplegar unas extensiones para apoyar las piernas y viajar prácticamente tumbados.
Un interior por tanto referencia en cuanto a trato a los ocupantes, con mucho espacio en cada una de las plazas y un confort que se ve acompañado de un rodar silencioso para un monovolumen del peso y las dimensiones que exhibe el Staria. Para acceder a las plazas traseras hay dos puertas laterales corredizas que, en esta versión, tiene accionamiento automático como también lo tiene el portón del maletero.
A sus mandos sin duda sientes que estás ante un modelo diferente a lo habitual, con una instrumentación mediante una pantalla de 10,25 pulgadas y un sistema multimedia con pantalla táctil de las mismas dimensiones, conexión a internet, servicios en línea «Bluelink» y compatibilidad con Android Auto y Carplay. En el caso de esta versión tope de gama, incluye además un sistema de sonido Bose con 12 altavoces.
Como en otros modelos de la marca, la palanca selectora del cambio ha sido sustituida por botones. Basta pulsar el botón D y el Staria se pone en marcha con una respuesta suave y progresiva de su motor diésel de 2,2 litros de cilindrada y 177 CV asociado a una caja de cambios automática de ocho velocidades y a un sistema de tracción total. Lógicamente los primeros metros gana velocidad con algo de pereza, pero una vez coges ritmo de marcha el buen funcionamiento del cambio y la respuesta del motor a medio régimen permiten mantener ritmos altos con mucha soltura.
Es un monovolumen diseñado para largos viajes, con un rodar de muy alta calidad y que aborda los tramos virados con mucha más soltura de la esperada. La dirección transmite bien y con precisión los movimientos de volante y no hay que bajar el ritmo cuando llegan las curvas. Todo en el Staria es confort y disfrutar del paso de los kilómetros, con suspensiones que filtran bien las irregularidades y un interior ejemplar por el trato a los ocupantes.
FICHA TÉCNICA:
VERSIÓN Staria 2.2 CRDI 4x4 AT; MOTOR Diésel, 4 cilindros, turbo; CILINDRADA 2.199 cm3; POTENCIA MÁXIMA 180 CV a 3.800 rpm; PAR MÁXIMO 430 Nm a 1.500 rpm; CAMBIO Automático de 8 vel.; VELOCIDAD MÁXIMA 185 km/h; ACELERACIÓN 0-100 KM/H 12,4 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 7,9 l/100 km; AUTONOMÍA 544 km; DIMENSIONES 5.253 / 1.997 / 1.990 mm; NEUMÁTICOS 235/55 R 18; PESO EN VACÍO 2.367 kg; MALETERO 117 l (con 7 plazas); PRECIO 62.990 €