El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha querido dejar claro una vez más los efectos nocivos del desafío soberanista en la economía española: sin no se hubiera producido el desafío la prima de riesgo estaría por debajo de los 90 puntos y las agencias de calificiación habrían mejorado la nota de España.
Así lo ha señalado Guindos a los medios antes de comparecer en la Comisión de Economía del Congreso para explicar el Plan de Estabilidad enviado a Bruselas, donde ha reconocido que la situación está afectando también a la Bolsa y puede acabar teniendo consencuencias en el PIB nacional.
En concreto, el Gobierno calcula que cinco décimas de la desaceleración prevista en 2018 se explicarían por la situación catalana. Esto supone que, si la situación no se resuelve, la economía española podría perder 5.000 millones por el desafío soberanista.
Las empresas volverán
A pesar de los riesgos, Guindos se ha mostrado optimista y cree que la situación se reconducirá tras las elecciones del 21 de diciembre, lo que permitirá que la economía catalana vuelva a liderar el crecimiento español.
De hecho, cree que las empresas volverán a Cataluña cuando las elecciones dejen claro que Cataluña seguirá siendo parte de España, de la Unión Europea, de la zona euro y de la economía mundial. "Se generará un clima de normalidad que se notará en la actividad, la inversión, el consumo y la financiación", ha dicho.
