La Agencia Tributaria ha presentado este martes los resultados de la lucha contra el fraude fiscal en 2016. Las cifras son bunas, pero no tanto como las de 2015. Hacienda ha ingresado 14.883 millones de euros, un 5% menos que un año antes, cuando se obtuvieron 15.664 millones gracias a una serie de expedientes singulares que no se han producido en 2016.
Si descontamos la aportación de esos expedientes singulares, que difícilmente se van a repetir en el tiempo, los resultados mejoraraían en 1.900 millones de euros la cifra anotada en 2015 y marcarían un nuevo máximo histórico para la Agencia Tributaria. Respecto a 2014, el aumento sería del 20%.
Los ingresos directos procedentes de actuaciones de control ascendieron a 9.533 millones de euros, mientras que la minoración de devoluciones solicitadas por los contriuyentes aportaron 4.847 millones. Los ingresos totales del frause completan con 504 millones procedentes de declaraciones extemporáneas (fuera del plazo voluntario) sin requerimiento por parte de la Agencia.
Aumenta la actividad inspectora y los 'peinados' de negocios y alquileres para detectar economía sumergida
Dentro de las actuaciones de la Agencia, destaca su actividad inspectora a lo largo de 2016, con un total de 108.338 actuaciones nominales de comprobación e investigación, por encima de las que se hicieron en 2015. Especial relevancia han tenido también las actuaciones de entrada y registro, que crecieron un 24%, hasta 2.021 actuaciones.
Tambén se han registrado muchos 'peinados' de negocios y particulares para detectar economía sumergida. Se trata de actuaciones de control 'ni situ' de obligaciones formales y registrarles en sectores de alto riesgo fiscal. En concreto, el año pasado se hicieron 24.491 actuaciones, un 12% más. Las diseñadas para detectar alquileres opacos ha crecido casi un 50%.
