Hacienda necesita recaudar de aquí a fin de año casi 2.000 millones de euros más al mes de lo que ha conseguido ingresar entre enero y julio, si quiere cumplir con la previsión de recaudación para el conjunto del año y que cuadren los Presupuestos.
En los primeros siete meses del año, la Agencia Tributaria ha ingresado 123.952 millones de euros por impuestos, lo que supone un 55,8% del total que tiene previsto recaudar en el ejercicio: 222.107 millones de euros, según quedó recogido en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2021.
Aunque la recaudación es superior a la que se produjo en el mismo periodo del año anterior, el primero marcado por el impacto de la pandemia, es inferior a la que suele tener acumulada Hacienda para este momento del año en un ejercicio normal: en 2019 ya había ingresado un 56,5% de la recaudación anual prevista; en 2018, el 56,4% y en 2017, el 58%.
Esto supone que en los cinco meses que quedan de año -incluyendo agosto, cuya recaudación no está cerrada-, Hacienda tiene que ingresar un 44,2% del total, es decir, 98.155 millones de euros.
Si hasta la fecha el ritmo de ingresos ha sido de 17.707 millones de euros al mes, en promedio, a partir de ahora lo recaudado al mes deberá ascender a 19.631 millones mensuales de media, 1.924 millones más que hasta ahora.
La recaudación supera la de 2019 por el IRPF y Sociedades
En lo que va de año los ingresos tributarios han crecido un 17,2% respecto a 2020 y, lo que es más representativo, un 3,1% respecto al mismo periodo de 2019, tal y como se recoge en el último informe de recaudación.
El aumento se concentra en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y en el Impuesto sobre Sociedades -por el aumento del empleo, los salarios y el tipo impositivo en las rentas altas, así como por la mejora de los beneficios empresariales, en comparación con el año de la covid-19-.
Los tributos ligados al gasto, como el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) y los Impuestos Especiales, están todavía por debajo de las cifras pre-crisis
Sin embargo, los tributos ligados al gasto, como el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) y los Impuestos Especiales, están todavía por debajo de las cifras pre-crisis.
Los cambios normativos introducidos por Hacienda en los PGE de este año han generado por el momento sólo 615 millones de euros adicionales: 73 millones de la subida del IRPF, 113 millones por la subida del IVA en las bebidas azucaradas y edulcoradas, 265 millones por la subida del tipo en el Impuesto sobre las Primas de Seguro, y 160 millones por el Impuesto sobre las Transacciones Financieras -conocido como 'tasa Tobin'-.
La bajada del IVA de la luz restará 1.200 millones
Pese a que tiene por delante cinco meses para incrementar la recaudación, el enfriamiento de la confianza económica podría apuntar a una desaceleración en los próximos meses con impacto en los ingresos tributarios, sobre todo si esto afecta al consumo y los beneficios empresariales.
A esto hay que sumar que la rebaja del IVA de la luz del 21% al 10% supondrá una merma de 1.200 millones de euros de recaudación que no estaba prevista, como ya desveló Vozpópuli, con lo que la Agencia Tributaria necesitaría incrementar los ingresos en esa cantidad para conseguir su objetivo.