Esto es algo común en la mayoría de sectores pero en el caso de la banca, a medida que más bancos se vuelven eficientes, los mismos servicios siempre estarán disponibles a menor precio.
Precisamente aquí es donde comienza la próxima gran ola tecnológica, la inteligencia artificial (IA), y su impacto en el sector bancario. Es evidente que la IA desempeña un papel destacado en los servicios bancarios y financieros desde hace muchos años. Pero la IA generativa (gen AI) es distinta. Con ella, el sector bancario puede salir del bucle de la obsolescencia tecnológica y establecer relaciones más sólidas y eficaces con sus clientes.
Aplicaciones tradicionales de IA en el sector bancario
Los bancos son particularmente “ricos” en datos, procesando miles de millones de transacciones e interacciones de clientes en propiedades físicas y digitales. Estos datos son la fuerza vital de la IA y es por eso que los bancos invierten, desde hace muchos años, en herramientas de IA como los algoritmos y estrategias de negociación habilitados por IA o herramientas de gestión y detección de riesgos capaces de identificar fraudes y aumentar la coordinación con las regulaciones financieras, entre otros.
Gracias a este predominio de los datos, los bancos han sido pioneros en la adopción de la IA y otras tecnologías digitales. De hecho, más allá de los sectores tecnológico y de comunicaciones, las compañías de servicios financieros (entre las que la banca es un sector clave) han tratado de contratar a más profesionales relacionados con la IA que ningún otro sector (véase el gráfico).
Más allá de la IA tradicional
Sabemos que antes de que apareciera la IA genérica, los bancos recurrían a modelos anteriores de IA, como el aprendizaje automático, el análisis de datos y el análisis de regresión. Pero la IA genérica representa un cambio de paradigma que puede ayudar a los bancos a sacar el máximo partido de sus datos. Al integrar una multitud de conjuntos de datos estructurados y no estructurados en todas las unidades de negocio y, a continuación, analizar el impacto de sus conexiones, los sistemas de IA gen ofrecen a los directivos una mejor visibilidad y conocimiento de los riesgos y oportunidades dentro y fuera del banco.
En última instancia, la IA generativa no solo transforma la eficiencia operativa, sino que también redefine la manera en que los bancos interactúan con sus clientes y gestionan sus recursos. Esta tecnología permitirá a las instituciones financieras anticiparse a las necesidades del mercado y adaptarse con mayor agilidad a los cambios. Al aprovechar el poder de la IA generativa, los bancos podrán ofrecer servicios más personalizados y efectivos, fortaleciendo así su posición competitiva y asegurando un crecimiento sostenible a largo plazo.
