Octubre arranca con malas noticias para las empresas españolas que cotizan en Bolsa. Las dos primeras sesiones del mes han teñido de rojo el Ibex 35. La peor parte se la llevan las ‘utilities’, las empresas que explotan infraestructuras de servicios públicos, con el protagonismo de las empresas eléctricas.
Firmas como Iberdrola, Endesa y Acciona Energía ceden hasta un 6% de su valor esta semana. Desde el mercado culpan a los grandes fondos de inversión que han optado por retirar cerca de 5.803 millones del capital de estas tres empresas por el interés que ha despertado en el mercado los rendimientos de los bonos estadounidenses.
“Los rendimientos de los bonos estadounidenses continuaron el repunte de las sesiones previas, y alcanzaron el nivel del 4,7% en el caso del bono a 10 años, su mayor nivel desde 2007, lo que encarece con toda probabilidad la financiación de aquellos valores considerados de crecimiento”, señalan los analistas de Link Securities. “Además, las utilities europeas como Iberdrola, Endesa, Naturgy, Acciona, Engie o Veolia se vieron afectadas de forma negativa en sus cotizaciones, ya que compiten con estos rendimientos para obtener el favor de los inversores”, añaden los expertos.
Iberdrola, la segunda compañía por capitalización bursátil del Ibex 35, cede un 6,6% desde la cotización con la que cerraba septiembre y que suponen 4.367 millones de euros menos de su valor bursátil. Endesa pierde un 4,46%, 910 millones de euros de capitalización, y la filial energética de Acciona eleva estas caídas hasta el 6,55% con una retirada de capital por parte de los grandes inversiones de 526 millones.
“Los mercados se están adaptando al nuevo régimen, marcado por una mayor volatilidad y tipos de interés más elevados. En nuestra opinión, esto está empezando a generar algunas oportunidades”, comentan los expertos del BlackRock Investment Institute. “Los rendimientos de la deuda pública a largo plazo se han disparado, lo que hace que los bonos europeos nos parezcan más atractivos. Sin embargo, incluso a pesar de haberse replegado, la renta variable de los mercados desarrollados sigue en líneas generales sin reflejar plenamente el nuevo entorno de tipos ni la coyuntura macroeconómica desfavorable”, puntualizan.
¿’Efecto dominó’ en el sector renovable?
El argumento de mover el dinero de la estabilidad de las eléctricas a los bonos estadounidenses no es el único que circula por el mercado. Tras dos jornadas de fuertes caídas para gigantes como Iberdrola, con gran presencia en Estados Unidos, se hace referencia a un posible ‘efecto dominó’ en el sector renovable del país.
El gigante energético local NextEra Energy, que capitaliza cerca de 104.000 millones de dólares en el mercado, se desploma en octubre un 11% y supone su mayor caída desde el inicio de la pandemia. Este batacazo llega por las preocupaciones que existen en el efecto que tenga los elevados tipos de interés sobre la financiación de la energía limpia. Su filial de energía renovable, NextEra Energy Partners, revisó a la baja sus expectativas de crecimiento anual hasta 2026 por los mayores costes de endeudamiento que hacen más difícil financiar proyectos.
Iberdrola intentó adelantarse a este escenario. La eléctrica que dirige Ignacio Sánchez Galán ha tenido que dar un acelerón a su plan de desinversiones para seguir cumpliendo con los objetivos de su plan estratégico. Un acelerón de cerca de 7.500 millones de euros. Una cifra muy engordada por los 6.000 millones de dólares, 5.482 millones de euros al cambio actual, que logró en México.
Una operación a la que suma las redes de Brasil, su megacartera renovable en España y la venta de una participación minoritaria en su parque eólico marino de Alemania. Estos movimientos buscan convencer a los inversores de que tienen vías de financiación alternativa a este elevado coste de endeudamiento.