El acuerdo en Bruselas en la madrugada del lunes al martes vaticinaban el resurgimiento de las bolsas europeas tras tres meses de caídas. Principalmente, las miradas estaban puestas en los mercados de Italia y España al ser los grandes beneficiados de la inyección de capital del rescate comunitario. Y, en las primeras horas de la sesión del martes, los inversores del Ibex 35 compraron el 'éxito' o 'victoria' del presidente Pedro Sánchez ante los países del norte de Europa, llegando incluso a subir un 2% a media sesión. Pero, desde entonces, la euforia se ha desinflado y el selectivo español ha cerrado las dos sesiones con decepción.
El Ibex salvó los muebles el martes con una subida moderada del 0,2% y este miércoles ha liderado las caídas entre los principales índices europeas con un desplome del 1,4%. El consenso de analistas consultado por Vozpópuli considera que, pese a ser una buena noticia el acuerdo para las cotizadas españolas, los grandes inversores están más preocupados por el descontrol de la pandemia, el nuevo 'rebrote' en la tensión China-EEUU y la ansiada llegada de las vacunas para fijar un horizonte de 'normalidad'.
"Este acuerdo podría no ser el denominado 'momento Hamilton' que tantas expectativas generó y en virtud del cual se esperaba que la UE asumiría la deuda de los Estados miembro", afirma Andreas Billmeier, analista de Western Asset. "Pero no cabe duda de que constituye un hito sumamente relevante, no todos los días vemos a un prestatario supranacional de primer nivel de un tamaño prácticamente equivalente al de Alemania sumarse a la mesa de emisiones europea", añade.
"El tono del mercado sigue positivo, de momento, pondera más los avances en las vacunas y la mejora de la macro que los miedos a los rebrotes", reflejan los analistas de Bankiter. "Dicho esto, tras las últimas subidas no descartamos que se produzca alguna jornada de recortes. De ser así, éstos serán puntuales, servirán para consolidar niveles y creemos que no deberían alterar el fondo alcista del mercado", matizan.
¿División o unión?
Otro de los frentes de confusión que deja el acuerdo en el mercado es si es un reflejo de una Unión Europea más cohesionada o, por otro lado, más dividida. En apariencia, la formalización de un acuerdo sobre el fondo de recuperación de la UE constituye "un logro notable", como define Wolfgang Bauer, gestor del equipo de renta fija de M&G.
"El hecho de que los líderes europeos hayan alcanzado un acuerdo sobre un programa de 750.000 millones de euros superó con creces lo que la mayoría de los analistas consideraba posible hace tan solo unos meses. Pero la larga y ardua maratón de negociaciones puso de manifiesto hasta qué punto la UE está dividida en relación con la integración fiscal", detalla Bauer.
Los llamados 'cuatro frugales' (Austria, los Países Bajos, Suecia y Dinamarca) solo se mostraron dispuestos a aceptar la propuesta después de ver incrementados los reembolsos que reciben respectivamente de sus contribuciones a los presupuestos de la Unión. "Este hecho no es baladí, dado que muestra que el compromiso alcanzado se cimienta, al menos en parte, en un incentivo extraordinario para determinados países que no se puede replicar tan a menudo como pudieran desear", apunta el analista de M&G.
Malas noticias de EEUU
Aunque los inversores también notan que la pandemia no está controlada. No sólo por las noticias que llegan en España. En Estados Unidos, un país donde los gigantes del Ibex tienen grandes intereses y donde se concentran gran parte de los inversores que apuesta por el mercado español, el virus ha infectado ya a más de 3,8 millones de personas, según los datos de la Universidad Johns Hopkings, y ha matado a casi 142.000 personas.
Así, EEUU reportó más de 1.000 muertes por Covid-19 este martes, según informa Reuters. Es la primera vez desde el 10 de junio que el país alcanza este hito. Mientras, empresas como Pfizer o BioNTech empiezan a dar señales al mercado de que sus vacunas pueden ser una realidad en los próximos meses. Pero todavía es insuficiente para levantar los ánimos.
Y desde Estados Unidos llegan otras noticias que tampoco han gustado al mercado europeo históricamente: la guerra comercial del Gobierno de Donald Trump con China. El Departamento de Estado de EEUU ha confirmado este miércoles que ha ordenado a China cerrar su embajada en Houston, Texas, lo que ha llevado a Pekín a insistir en firmes represalias.
Un nuevo reflejo de las tensiones políticas entre las dos economías en plena pandemia. El portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus, ha declarado que ha ordenado el cierre del Consulado General de la República Popular China en Houston, para proteger la propiedad intelectual americana y la información privada de los americanos.
Un último ingrediente de una receta de incertidumbre que impide todavía que el Ibex y sus socios europeos vuelvan a despegar. Aunque no hay que ser negativos como concluye Paul O’Connor, responsable de Multi-Activos en Janus Henderson. "Europa ha gestionado el coronavirus de forma mucho más eficaz que América y, al menos durante los próximos meses, resulta razonable considerar que la región ofrece a los inversores a escala mundial un refugio de las tormentas políticas que acechan a EEUU".