Federico Rettori, el hombre que ha presentado la denuncia por blanqueo de capitales o "lavado de activos" contra la Fundación de Lionel Messi, señala directamente al padre de Leo, Jorge (61 años), como motor de la presunta trama sobre la que ha abierto ahora una investigación la jueza de la Audiencia Nacional, María Tardón, que salpica al mejor futbolista del mundo.
"Jorge Messi es el que ha llevado todo, en España y en Argentina. La Fundación ha sido su caja B a la hora gestionar los ingresos por la imagen de Messi. Tiene una mentalidad de sacar ventaja de lo que sea, de creer que nunca le va a pasar nada. Leo probablemente no supo nada, pero su nombre impregna toda la operativa", dice quien en la denuncia se presenta como excolaborador de la ONG a Vozpópuli. "He presentado en la causa en Argentina más de 300 e-mails cruzados con la Fundación por asuntos ligados a ella, muchos de ellos directos con Jorge, que no han sido impugnados".
El peso de Jorge Messi en la supuesta operativa parece desprenderse también de la documentación presentada a la Audiencia Nacional y a la Fiscalía por Rettori, a la que ha tenido acceso Vozpópuli. Dicha documentación incluye una parte de información recogida en artículos periodísticos y una parte no periodística, en la que se incluyen papeles de convenios y transferencias que apuntan en la línea de presuntos "convenios pantalla" o "dobles convenios" y supuesto desvío de dinero a través de la fundación a una sociedad en Inglaterra, Hanns Enterprises, con sede en Luxemburgo.
"Jorge Messi es el que lleva todo, en España y en Argentina. Tiene una mentalidad de sacar ventaja de lo que sea, de creer que nunca le va a pasar nada. Leo probablemente no supo nada, pero su nombre impregna toda la operativa"
La denuncia presentada por Rettori enumera así "muchos convenios que fueron cobrados en parte o totalmente off shore (...) No se declaran (es decir nunca fueron incluidos en las memorias y balances) muchos convenios, eventos e iniciativas que generaron ingresos multimillonarios para la Fundación Messi (Oredoo, Aspire Academy, Pie de Oro en Japón, el libro Elegí Creer, Dolce & Gabbana)".
En la misma línea, menciona convenios de la fundación en Argentina que, denuncia, no fueron declarados a las autoridades fiscales, con Universal Assistance, Jempsa, Antártica Films, Golosinas Marengo, Latam, Fox Sports Latin American Holdings, Universal Assistance, Maori SA, el libro Elegí Creer, Hospital Austral, Televisa, Flecha Bus SA y Herbalife.
El expediente de la investigación judicial que se lleva adelante desde hace un año en Argentina señala que solo el 6% de los cheques girados por la Fundación desde España a Argentina entre 2012 y 2018 se correspondía con fines benéficos. "Se busca lavar activos", asegura Retorri, que estima que la cifra, a través de la filial argentina, ronda los 10 millones de euros. "Para dimensionar el caso en España hace falta que avance la investigación".
Así las cosas, el denunciante incide en que la ONG (creada en España en 2009) no presentó cuentas hasta 2013, cuando tenía un saldo de más de seis millones de euros, que cayó a 5,3 millones en 2017. "Los gastos totales en esos cinco años son exageradamente altísimos para una fundación con una sola empleada y sin atención al público, de lo que se deduce su actividad ficticia y que opera como una pantalla para ocultar los ingresos de los denunciados", dice el texto del denunciante al que la Audiencia Nacional tomará declaración tras pedirlo la Fiscalía.
Señala directamente a Jorge
A la hora de presentar documentación propia al juzgado, Rettori presenta e-mails para reflejar su colaboración con la fundación a través de la figura de Jorge Messi, cuya firma también aparece como representante de la ONG en los convenios presentados por el denunciante.
Rettori asegura haber empezado a colaborar con la fundación en el año 2010, tras contactar con ella para pedir apoyo en la labor social de su ONG, Por un buen camino, antes de poner el nombre de Leo Messi a un centro nutricional de la organización en Sierra Leona.
Según narra el denunciante, fue entonces cuando empezó una relación directa con la Fundación Messi en pos de trabajos sociales que por lo general no acabarían concretándose y negociaciones que no llegarían a buen puerto.
Presunto maquillaje de cuentas
El propio Rettori denunciaría tiempo después que recibió 50.000 euros por el centro en Sierra Leona frente a los 75.500 que la Fundación declararía en sus cuentas de 2014.
En su denuncia presentada ahora en España, señala que en 2015, el propio Jorge Messi pidió que se hiciera una "presentación presupuestaria que se tenía que realizar ante la Hacienda española, ya que ésta última exigía comenzar a invertir fondos para acciones sociales", de forma que "se diseñó un trabajo con 28 proyectos para desarrollar en 2015, con un presupuesto de 2.800.000 euros".
El propio Rettori asegura así que, tras recibir el encargo de Jorge Messi de "ordenar la documentación sobre el dinero que había salido de las arcas de la fundación desde España desde sus inicios" a la misma vez que le decían que finalmente no se destinarían todos los fondos proyectados en 2015, constató que buena parte de ese dinero ya había sido invertido anteriormente.
"Comencé a darme cuenta que Jorge Horacio Messi nos quería solo para que agregáramos material a la web, al Facebook, que servía para enmascarar acciones sociales de poco relieve como si fuesen "grandes avances" y así justificar fraudulentamente el fin social de la fundación"
"Comencé a darme cuenta que Jorge Horacio Messi nos quería solo para que agregáramos material a la web, al Facebook, que servía para enmascarar acciones sociales de poco relieve como si fuesen 'grandes avances' y así justificar fraudulentamente el fin social de la fundación, cuando en realidad el dinero que se debe invertir no se hace y es desviado a cuentas ocultas en diferentes países".
De acuerdo a la denuncia de Rettori, la fundación ha funcionado en España "todos estos años con una sola empleada, la mujer de Rodrigo Messi (hermano de Leo que preside la fundación), Florencia Parisi, no tiene atención al público y opera en un edificio de Barcelona que no tiene ni cartel de la fundación".
Rodrigo y Jorge, entre 2009 y 2015, y ahora la inmobiliaria Limecu España, de la que es administrador el propio Rodrigo, han sido administradores de Leo Messi Management SL, la empresa que asesora e intermedia en materia de patrocinio, publicidad y explotación de derechos de imagen del futbolista y que, junto al Barcelona y la propia Limecu, sobresalen entre los donantes de la Fundación, según las últimas cuentas.
Este medio ha intentado contactar con la Fundación Messi y su entorno, pero hasta ahora no han respondido a las preguntas de Vozpópuli sobre el asunto.