El pasado 1 de abril, había en España 10.149.834 pensiones en vigor, de las que 6.464.131 eran de jubilación (el 63,68% del total); 2.351.785, de viudedad (23,17%); 946.558 (9,32%), de incapacidad permanente); 341.346, de orfandad (3,36%), y 45.924, de favor de familiares (0,45%). Para satisfacerlas, la Seguridad Social tuvo que abonar 12.711 millones de euros, un 6,25% más que en el mismo mes del año anterior.
Si de algo está satisfecho el Gobierno es de haber reforzado el denominado escudo social y haber vinculado la subida anual de las pensiones a la evolución del Índice de Precios de Consumo de los doce meses previos a su entrada en vigor. Y es que, desde el año 2018, la fecha de la llegada de Pedro Sánchez a la presidencia del Gobierno, las pensiones se han revalorizado un 19,7% mientras el IPC ha subido un 19,2%, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística.
Pero, como asegura la sabiduría popular, no es oro todo lo que reluce. De la ultima nómina de 10,149 millones de pensiones del conjunto del sistema (incluidos todos los regímenes), algo más de la mitad, exactamente el 51,3%, 5,2 millones, no alcanzan los 1.000 euros mensuales. En estas nóminas están incluidas las pensiones de jubilación, viudedad, incapacidad permanente, orfandad y favor de familiares, por lo que no es de extrañar que la media se rebaje al computarse estas últimas.
Lo que sí sorprende más, es que después de revalorizaciones anuales del 8,5% en el año 2023 y del 3,8% en el presente ejercicio, como consecuencia de una inflación disparada, el 41,6% de las pensiones de jubilación no alcance los 1.000 euros. Son, según los últimos datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social, 2.689.052 pensiones de un total de 6.464.131 que conforman la nómina de las pensiones de jubilación.
Como señala el propio Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, “la prestación económica por jubilación, incluida en todos los regímenes del sistema de la Seguridad Social, trata de sustituir las rentas del trabajo por una pensión vitalicia, única e imprescriptible, cuando el trabajador, a causa de la edad, cesa total o parcialmente en su actividad laboral”. Son beneficiarios de la misma las personas incluidas en cualquiera de los regímenes, que reúnan las requisitos establecidos de edad, periodo mínimo de cotización (15 años) y hecho causante. La cuantía de la pensión está determinada por la base reguladora y el porcentaje que se aplica a la misma en función de los años cotizados.
El régimen general es el régimen de afiliación más importante de la Seguridad Social. En él se incluyen los trabajadores por cuenta ajena y asimilados de los sectores de la industria y los servicios no incluidos en regímenes especiales. De los 21,1 millones de afiliados al Sistema de la Seguridad Social, 16,6 millones corresponden al Régimen General, de acuerdo con las últimas cifras del mes de abril.
Pues bien, si circunscribimos el análisis al régimen general, más de 3,33 millones de pensiones, el 44,29% del total, no alcanzan los 1.000 euros mensuales, cuando la media es de 1.367 euros. En el caso de las pensiones de jubilación, una de cada tres pensiones está por debajo de los 1.000 euros, con una media de 1.598 euros. La mayor concentración de pensionistas se da en la franja de entre 750 y 800 euros mensuales, en el que figura el 8,24% del total.
Y es que el salario más frecuente estará ahora (no hay datos oficiales del INE aún) en el entorno de los 20.000 euros mensuales brutos y el segundo salario más frecuente, alrededor de los 18.000 euros. Las cotizaciones sociales asociadas a esos sueldos no permiten pensiones muchos más elevadas por muchos años que se tengan cotizados.
El caso de los trabajadores autónomos es aún más dramático. En España hay en la actualidad 3.364.948 afiliados al régimen especial de trabajadores autónomos (RETA) y el total de trabajadores por cuenta propia que perciben algún tipo de pensión es de 1,987 millones (1,338 millones, de jubilación). De esas cifras, el 74% y el 66%, respectivamente, percibe menos de 1.000 euros. La pensión de jubilación más cobrada está entre 750 y 800 euros: la recibe un 14,5% del total. La media era en abril de 961 euros. Tradicionalmente, más del 80% de los trabajadores autónomos ha venido cotizando lo mínimo fijado por ley.
Roblenpie
El sistema está en riesgo, nada es permanente, si los salarios de los trabajadores cotizantes son bajos, llegará el momento que no se podrá asumir esa carga tan elevada, y tendrán que reajustar, sobre todo en las pensiones más altas.
pacolo
Para poder opinar sin postularme de uno u otro lado, es necesario saber cuanto han cotizado. También hay que pensar que no todos van a cobrar lo mismo, como todo en la vida siempre habrá ricos y pobres
Darksith1977
Este artículo está cojo: qué cantidades han aportado estos pensionistas cuando estaban en activo? Por otro lado, cuantos pensionistas cobran la pensión máxima y qué patrimonio y renta tienen de media?
Pangat
Muchos autónomos e incluso receptores de pensiones no contributivas decidiero cotizar poco o no incluso cotizar. Hoy muchos de ellos tienen inmuebles y patrimonio de los que viven muy bien.
xny556
que hubiesen cotizado mas...
PijoListo
Si así añadimos que hasta un café se paga con una tarjeta de débito y ni un solo joven ve el peligro de desaparición del dinero líquido, puede afirmarse que los jóvenes de hoy serán los esclavos del futuro si no lo son ya
FBR
Eso es debido a que los autónomos tienen el privilegio de poder elegir cuánto cotizar a la Seguridad Social, no como los contratados por cuenta ajena; y por tanto, el 86% prefiere dejar dinero en el banco a darlo al Estado. Yo también lo haría, no critico que lo hagan, critico al que está forrado y va de víctima por la vida. Muchos de ellos han cotizado tan poco, que a su pensión se les añade un "complemento a mínimos", por lo que acaban cobrando más pensión de lo que les correspondería en función de las cotizaciones. No gustará mi comentario, pero no he dicho nada que no sea cierto.