Luis de Guindos acentuó este jueves en el debate de la ley de Cajas la plena disposición del Gobierno al diálogo con todos los grupos parlamentarios para retocar el proyecto enviado al Congreso. Detrás de esta invitación no solo están los compromisos contraídos por Mariano Rajoy con algunos de los principales actores de la reforma, sino también largas horas de conversaciones del ministro de Economía con Vicente Martínez Pujalte, Valeriano Gómez, Josep Sánchez Llibre y Pedro Azpiazu, los portavoces del PP, PSOE, CiU y PNV que trabajan en esta ley. El ministro les ha enviado a los cuatro el mismo mensaje: hasta el 15 de noviembre, fecha en la que se conocerá que España se libera de la tutela de la troika procedente del rescate bancario, el Gobierno no podrá mover piezas esenciales en la reforma de la ley de Cajas, dada la resistencia de la Comisión Europea, incluida la del titular de Competencia, Joaquín Almunia, a que la norma se suavice y se diluyan sus objetivos.
El 15 de noviembre, se conocerá que España se libera de la tutela de la troika, al no prorrogarse el rescate bancario, y esa es una fecha clave para el Gobierno
La férrea actitud de Almunia no solo ha enfadado al Gobierno, sino también al PSOE. “Quiere ser más papista que el Papa y llevar al extremo un principio de la reforma que nosotros no compartimos en su totalidad como es la separación entre la propiedad y la gestión de las entidades. Tenemos cada vez más claro que el antiguo modelo de cajas tenía mucho de bueno y que la troika quiere enterrarlo sin más”, se queja una voz autorizada del primer partido de la oposición.
El próximo martes se conocerán las enmiendas parciales al proyecto de ley de los diferentes grupos parlamentarios, pero el Gobierno no moverá pieza sobre ellas hasta mediados de noviembre, bien encauzado el debate en el trámite de comisión o, si fuera necesario, cuando la norma pase al Senado, dependiendo siempre de hasta donde apriete Bruselas. Al margen de si el presidente de CaixaBank, Isidro Fainé, conseguirá compatibilizar su cargo con el que tiene en La Caixa durante más tiempo del previsto, como CiU se encargará de solicitar en una de sus enmiendas, hay preocupación bastante extendida en algunos partidos, singularmente el PSOE y el PNV, sobre el sitio donde descansará el fondo de reserva de capital pensado para situaciones de dificultad. A los nacionalistas catalanes les da igual que sea en el banco o en la fundación procedente de la antigua caja porque dan por seguro que Fainé se mantendrá al frente de ambas durante un tiempo prudencial. Sin embargo, los nacionalistas vascos juegan este partido en otra liga ya que el presidente de Kutxabank, Mario Fernández, solo se mantendrá al frente del banco y le interesa que esta reserva de capital esté bajo su control. Como una parte de este fondo procederá de los beneficios, tendrá un mejor tratamiento fiscal si se queda en el banco que si va a la fundación, otra razón de peso que explica la actitud del PNV, convencido de que por esta vía puede garantizarse también capital suficiente para atender a la obra social. El PSOE comparte también este criterio y se lamenta del rechazo que proviene de la Comisión Europea, con Almunia a la cabeza. En opinión del exministro Valeriano Gómez, los requisitos adicionales de reservas deben estar en el banco para garantizarse su capacidad sobre la obra social y no quedar discriminado respecto al resto de las entidades privadas. “Competencia, sí, pero desde la igualdad y no desde la discriminación”, resumió.
Los socialistas y los nacionalistas vascos dan la batalla para que las nuevas reservas de capital se mantengan en los bancos y no vayan a las fundaciones
En el debate de las cinco enmiendas a la totalidad rechazadas este jueves en el Congreso quedaron retratados todos los grupos. El que más navegó a contracorriente de los principales partidos fue UPyD. Su portavoz económico, Álvaro Anchuelo, registrará enmiendas parciales para garantizar mejor la despolitización completa de las nuevas entidades, mediante la reducción del porcentaje de consejeros que podrán ser nombrados desde las administraciones públicas y la fijación de un periodo de cuatro años para que un cargo público, desde que deja de serlo, pueda acceder a los órganos de gobierno. También intentará mejorar el gobierno corporativo rebajando el número de consejeros y la influencia de los grandes impositores, al tiempo que propondrá nuevos controles para evitar el espectáculo de las retribuciones abusivas.
UPyD presentará enmiendas para reducir el número de consejeros, rebajar la influencia de los grandes impositores y garantizar la despolitización de las entidades
La actitud de UPyD respecto a las incompatibilidades entre simultanear cargo en el banco y la fundación queda nítida en estas frases de Anchuelo: “Ha generado mucha polémica si el presidente de la fundación puede ser también presidente del banco. Es reveladora la capacidad de influencia de algunas personas y la atención que reciben a la vista de algunas informaciones de prensa… En esta ley, como en tantas otras, el Gobierno actúa un poco a rastras. Se dan nombres y apellidos y lo que nos asombra es que esto pueda condicionar una ley en un país de cuarenta y siete millones de habitantes. Es significativo hasta qué punto las personas que tienen cualquier poder en este país no están dispuestas a ceder un ápice, por muchas crisis bancarias o sociales que haya. No están dispuestos ni siquiera a quedarse con una de las presidencias y poner en otra a un hombre de paja. ¡No tienen que estar ellos en persona en un sitio y en otro! Habría que establecer unas incompatibilidades totales entre ambas instituciones”.
El segundo tiempo del partido se jugará en la comisión de Economía, aunque será Bruselas la que condicione el calendario con el que trabaja el Gobierno para mostrar las últimas cartas de la reforma. Todavía faltan semanas para ver si La Caixa, Unicaja, Ibercaja o la BBK, ejemplos de buena gestión, terminan recibiendo el mismo tratamiento que Novacaixagalicia, Catalunya Caixa, Bancaja o Bankia, una de las quiebras bancarias más costosas de nuestra historia.