La Liga ha seleccionado a los nuevos operadores de su negocio televisivo en España, la española Telefónica y la británica Dazn, que se llevarán cinco partidos cada uno por jornada en lotes distintos durante cinco temporadas, por 4.950 millones de euros a pagar en cinco años. Uno de los lotes implica llevarse el Clásico Real Madrid-Fútbol Club Barcelona de vuelta, y el otro, el de ida, según ha podido saber Vozpópuli.
Telefónica no dispondrá ya de la exclusividad total, pero tendrá reservado un paquete de tres jornadas completas de alto nivel. Dichas jornadas incluirán, en cada una de ellas, "partidos disputados por el Real Madrid C.F., F.C. Barcelona y el Club Atlético de Madrid en los que se enfrenten a los seis (6) primeros clasificados de la temporada anterior; y contra el Valencia C.F., Athletic Club de Bilbao o Real Betis Balompié, si alguno de estos tres equipos no estuviera dentro de los seis primeros clasificados".
La oferta de Movistar ya permite acceso con recargo a la OTT de Dazn, lo que hace suponer que la compañía de José María Álvarez-Pallete buscará ofrecer todos los contenidos a través de su línea de pago.
Telefónica pagaba 980 millones anuales hasta ahora
La subasta de esta semana corresponde al negocio del fútbol de Primera en hogares, pero no en establecimientos públicos-bares y Segunda, que se definirá en marzo de 2022. Telefónica viene de pagar al menos 980 millones anuales por el principal mercado de La Liga.
Ha sido una subasta histórica, mediada por cambios en los pliegos para dar cabida a nuevos oferentes ante el impacto que ha tenido la pandemia. El organismo que preside Javier Tebas ha procurado un nuevo tipo de adjudicación a cinco años vista, contrario a las consideraciones de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, para sortear un impacto sensible en las cantidades que venía recibiendo hasta ahora, explican fuentes conocedoras. El resultado es un incremento del 1% en los ingresos por temporada respecto al ciclo anterior.
La renovación parcial de Telefónica y la entrada de Dazn implica su aceptación del plan de negocio fijado por el fondo de inversión CVC Capital Partners, que acaba de hacerse con el 10% del negocio positivo de La Liga por cerca de 2.000 millones de euros ligados a unos objetivos que debe conseguir la patronal. El fondo se ha trazado como meta incrementar el valor del fútbol español en un 40% antes de 2032.
La Liga busca reflotar su audiencia
Fuentes cercanas a La Liga aseguran que la patronal cuenta con informes de despachos jurídicos y comerciales que indican que un contrato de cinco años favorece la competencia, la distribución y el precio menor a los consumidores. La nueva adjudicación, que sustituirá a la del ciclo 2019-2022 y supondrá la entrada del servicio OTT de Dazn, procuraría abaratar el fútbol a los usuarios en España. "Con la estructura a tres años, que estrangula la competencia entre operadores, hay más de dos millones de personas que, aun teniendo canales de pago, no pueden ver el fútbol", incidieron fuentes cercanas a La Liga.
El equipo con más seguidores, el Real Madrid, sufrió una caída de espectadores televisivos en España del 56% entre las temporadas 2018/2019 y 2020/2021. La caída se ha acentuado durante la última temporada, lo que sugiere un factor común a todos los clubes de La Liga: el propio golpe al producto que han generado derivadas de la covid como la ausencia de público en los estadios, la reducción del gasto en nuevos fichajes -frente a las apuestas de otras ligas- y un creciente desinterés alrededor de una actividad de ocio de visionado tradicional que exige, hasta la presente temporada, a cualquier usuario en España pasar por la caja exclusiva de Movistar.
En contraste, el banco de inversiones británico Barclays, aliado de la UEFA y La Liga frente a la Superliga de Florentino Pérez, ha advertido a Telefónica del golpe a su negocio de pago que le supondría perder los derechos exclusivos del torneo liguero español, cuyos principales animadores son Madrid y Barça.