La deuda del conjunto de las administraciones públicas creció en 14.448 millones en septiembre hasta marcar un nuevo récord: 1,578 billones de euros. Es el mayor incremento en un mes de septiembre respecto a agosto en 11 años. En septiembre de 2012 la deuda aumentó en 16.400 millones. Encadena dos meses al alza, tras el descenso que registró en julio, según los datos publicados este viernes por el Banco de España.
Por subsectores, la deuda del Estado ascendía en septiembre a 1,412 billones tras incrementarse en 15.410 millones con respecto a agosto. Por el contrario, las comunidades autónomas redujeron su deuda en 5.601 millones, hasta los 320.315 millones. Las corporaciones locales experimentaron un ligero incremento, hasta los 23.331 millones, mientras que la Seguridad Social se mantuvo sin cambios en 106.172 millones.
En términos anuales, el agujero de las finanzas públicas crece en alrededor de 70.000 millones. En el mes de septiembre, concretamente, fueron 73.000 millones más que en el mismo mes del año anterior. En 2019 y 2018 las subidas anuales rondaban los 30.000 millones. Es decir, que el crecimiento anual es más del doble de intenso ahora que entonces.
En todo caso, utilizando el Producto Interior Bruto (PIB) nominal de los últimos cuatro trimestres, la ratio deuda/PIB bajó al 109,9% en el tercer trimestre de 2023, según el Banco de España, por la mejora del PIB. Se acerca así al objetivo del Gobierno de situar el endeudamiento en el 108,1% del PIB este año. En todo caso, aún son casi diez puntos más que antes de la pandemia (100,2% en el tercer trimestre de 2019).
Europa ahora trabaja en las nuevas reglas fiscales, tras tres años suspendidas por las sucesivas crisis. A falta de que se concreten en una propuesta legislatura el próximo mes, se espera que los límites generales del 3% del PIB en el déficit y del 60% en la deuda se mantengan. España lleva 16 años sin tener unos niveles de déficit y deuda pública inferiores al 3% y 60% del PIB, respectivamente.
La última vez que el déficit público bajó del 3% fue en 2018 (año en el que gobernó primero el PP y luego el PSOE), pero entonces la deuda pública se situaba en el 100% (desde 2010 supera el 60%). Hay que remontarse a 2007 para encontrar el último momento en que España gozó de un déficit inferior al 3% del PIB (concretamente, un superávit del 1,9%) y una deuda inferior al 60% (del 35,8%).
En 2022 un total de 13 Estados miembros registraron niveles de deuda superiores al 60%, entre ellos España (111,6%). Diez países también tuvieron un déficit superior al 3%, entre los que estaba España (4,7%). Que incumplieran los dos límites, en 2022 sólo hubo cinco: Bélgica, España, Francia, Hungría y Austria. Por contra, que sí las cumplieran por completo en 2022 sólo hubo nueve países: Bulgaria, Dinamarca, Estonia, Irlanda, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, Eslovaquia y Suecia.