La deuda de las entidades españolas con el BCE volvió a marcar un nuevo récord histórico en agosto, hasta los 388.736 millones de euros, esto es, un 3,5% más respecto a los 375.549 millones contabilizados en julio, según datos del Banco de España. Este importe es el saldo vivo que las entidades residentes en España aún tienen pendiente de devolver al instituto emisor europeo como consecuencia de la financiación que el organismo les ha concedido previamente.
Las crecientes dificultades de las entidades españolas para financiarse en el mercado interbancario se aprecian al constatar que el crédito solicitado por la banca española al instituto que preside Mario Draghi se multiplicó por cinco respecto al registrado en agosto de 2011 (69.918 millones). La financiación neta concedida en agosto por el Eurosistema a las entidades españolas representó el 43,9% del total de la Eurozona, que ascendió a 885.373 millones de euros.