La morosidad del crédito concedido por bancos, cajas, cooperativas y establecimientos financieros que operan en España bajó en enero al 13,53% desde el 13,62% de diciembre pasado, la primera vez que disminuye desde febrero de 2013, debido a un cambio en la forma de calcular este indicador.
Según explica el Banco de España en una nota remitida este martes, el dato de enero incluye por primera vez en el cómputo total del crédito el correspondiente a los Establecimientos Financieros (EFC), lo que aumenta el saldo total y hace que caiga la tasa de morosidad.
Si no hubiera sido por este cambio, la ratio de morosidad del mes de enero habría aumentado al 13,78%, lo que hubiera representado un nuevo máximo histórico después del 13,6%, un nivel nunca visto desde que se tienen constancia de estos datos, desde 1962.
Según los datos provisionales de enero que hoy ha publicado el Banco de España, el sistema financiero español acumulaba en conjunto un volumen de créditos morosos de 197.183 millones de euros, inferior a los 197.235 millones registrados en diciembre.
En total, el sector tenía concedidos a sus clientes 1,457 billones de euros en créditos, por encima de los 1,448 billones que tenían un mes antes, debido al mencionado cambio metodológico que incluye a partir de ahora los datos de los EFC.
Esto se debe a que los EFC dejaron de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito el pasado 1 de enero, aunque se mantienen dentro del grupo de Instituciones Financieras Monetarias, explica el Banco de España, que añade que de esta forma los EFC han pasado a integrarse dentro de la categoría de "otros sectores residentes" (OSR), que agrupa a todos los agentes residentes excepto Administraciones Públicas, Banco de España y entidades de crédito.