Renfe ya cerró el primer trimestre del año con un descenso del 17,7% en los ingresos generados por el tráfico de viajeros en sus trenes AVE y Larga Distancia, a pesar de que el parón del transporte para restringir la movilidad ante la crisis sanitaria y el estado de alarma tuvo lugar en la segunda mitad de marzo.
La compañía ferroviaria pública ingresó 274,44 millones de euros por todos los tipos de trenes de viajeros comerciales entre enero y marzo, frente a los casi 333,3 millones contabilizados un año antes, según datos oficiales de la compañía a los que tuvo acceso Europa Press.
La caída de ingresos deriva de la paralización que el transporte registra desde que el 14 de marzo se decretó el estado de alarma en el país para combatir el coronavirus. Un parón que no pudo verse compensado con la actividad que se desarrollara hasta entonces.
De esta forma, Renfe cierra el trimestre con una caída del 16,9% en el número de viajeros transportados en trenes AVE, que situaron en 4,1 millones, frente a los casi cinco millones de un año antes.
Los usuarios del resto de trenes de Larga Distancia saldan los tres primeros meses con un desplome del 18,7%, hasta 2,12 millones.
De su lado, el servicio público de Cercanías transportó 99,8 millones de usuarios entre enero y marzo, un 19,1% menos respecto a los 123,33 millones de un año antes.
Los ingresos por venta de billetes de estos trenes cayó un 18,8%, hasta 158 millones, si bien la operadora recibe un aportación del Estado por prestar este servicio público, que en este periodo fue de 333,6 millones.
Menos gasto en canon y electricidad
El parón del transporte también supuso la disminución de alguna de las partidas de gastos de Renfe. La principal de ellas, el canon que paga a Adif por el uso de las vías, las estaciones y el resto de las infraestructuras ferroviarias, disminuyó un 3,5%, hasta los 297 millones.
También se reduce, un 18,1%, el gasto en energía para tracción de los trenes, mientras que el de prestación de servicios de abordo desciende un 8,4%, hasta suponer 15,1 millones.
En este caso, esta semana Renfe pactó con Ferrovial, la firma a la que tiene confiado este servicio, reorientar el contrato a prestación de información y ayuda a los viajeros.
Devolución de billetes
Desde que se decretó el estado de alarma, y dada la restricción de movilidad que establece, Renfe solo puede poner en circulación un tercio de sus trenes AVE y Larga Distancia, de los que además sólo puede vender el 30% de las plazas para garantizar las distintas entre pasajeros recomendadas por Sanidad.
No obstante, según datos del Ministerio de Transporte, los pasajeros de estos trenes se han desplomado un 98% desde entonces.
De hecho Renfe asegura que, por el momento, ya ha anulado y devuelto el importe de unos 800.000 billetes de tren. Se trata de los que se habían comprado anticipadamente para viajar desde que se decretó el estado de alarma y hasta el próximo 11 de mayo.
Esta paralización del transporte devolvió a la compañía ferroviaria pública a 'números rojos'. Al cierre del primer trimestre, la operadora presenta una pérdida antes de impuestos de 57 millones de euros. La división de viajeros perdió 50,9 millones.
En una comparecencia en el Congreso esta semana, el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ya apuntó que la crisis también afecta a las empresas públicas del Departamento. "Sus datos de movilidad, de viajeros y de ingresos han bajado muchísimo y, en consecuencia, deben acomodar sus servicios y su actividad inversora a la nueva situación", aseguró.