Berkshire Hathaway Chairman, el conglomerado del magnate Warren Buffett, ha vendido toda su participación en las cuatro principales aerolíneas de Estados Unidos -United Airlines, American Airlines, Southwest Airlines y Delta Airlines-, ante los problemas que atraviesan las compañías aéreas por el colapso en los viajes por el mundo a causa de la covid-19.
Hasta el estallido de la crisis, el grupo era uno de los mayores inversores de las cuatro aerolíneas más grandes de Estados Unidos, con entre un 11 y un 9% de los títulos en cada una de ellas, sumando un valor de alrededor de 4.000 millones de dólares a diciembre de 2019. Sin embargo, a lo largo del año, las acciones de estas compañías han caído entre un 45% y un 70% por el impacto de la pandemia en el sector aéreo.
En las últimas semanas, American, United, Southwest y Delta Airlines reportaron sus primeras pérdidas en años, puesto que la demanda de viajes en Estados Unidos -como en el resto del mundo- se ha hundido un 95%. Tanto es así que la Administración de Donald Trump ha salido al rescate de sus compañías aéreas con un plan de ayudas y créditos de 25.000 millones de dólares –aproximadamente 22.900 millones de euros–.
"El mundo ha cambiado para las aerolíneas"
Durante la reunión de accionista de Berkshire, Buffett ha asegurado que "el mundo ha cambiado para las aerolíneas", una industria que "desafortunadamente está realmente afectada por un cierre forzado que está más allá de nuestro control". En cuanto a la decisión de vender toda la participación, adelantó que "no financiaremos una compañía que pensamos que va a consumir dinero en el futuro".
El magnate explicó que había invertido entre 6.000 y 7.000 millones de dólares en las aerolíneas y "no conseguimos nada parecido a esa cifra, ese fue mi error". "Yo he sido quien ha tomado la decisión", ha sentenciado Buffet durante la explicación en la mencionada reunión.