Sacyr se queda sin el contrato de servicio de ayuda a domicilio del Ayuntamiento de Madrid en favor de Domus VI, uno de los principales operadores de residencias de España. Esta adjudicación para los próximos tres años, valorada en 192 millones de euros, consiste en la gestión de la asistencia en los hogares de ancianos con dificultades de autonomía personal, personas con discapacidad y dependientes.
En concreto, el grupo que preside Manuel Manrique era el encargado de realizar esta tarea en los distritos de Centro, Arganzuela, Moncloa-Aravaca, Latina y Carabanchel. El resto del servicio en Madrid se lo reparten entre Clece, empresa perteneciente al Grupo ACS, y Asispa. En total, el consistorio que dirige José Luis Martínez-Almeida repartirá 632 millones de euros por este servicio hasta 2023.
Domus está obligado a subrogar a todos los trabajadores de Sacyr que operaban en estos distritos. El Ayuntamiento ha recibido cinco propuestas para hacerse con este contrato. El criterio de "precio" tenía una ponderación del 15%, uno de los factores en los que suelen triunfar las propuestas de Sacyr en las adjudicaciones.
"Este servicio tiene como objetivo promover la independencia y autonomía personal de la persona usuaria, para que pueda permanecer en su domicilio el mayor tiempo posible, manteniendo control sobre su propia vida y mejorando la calidad de vida de ésta", explican desde el Ayuntamiento.
La mayor red de residencias en España
Por su parte, Domus VI llega con el aval de ser el propietario de la mayor red privada de residencias de ancianos en España. El grupo está controlado por el francés Yves Journel, una de las cien mayores fortunas del país galo (con más de mil millones de patrimonio personal).
A través de diferentes brazos de inversión, Domus irrumpió de lleno en el mercado español a partir del año 2017 con la conformación de un grupo de nombre equivalente en una operación que rondó los 2.000 millones (el mercado movía entonces unos 3.500 millones al año en total).
Domus tiene ahora también el apoyo del fondo británico ICG y lidera el sector en España con un volumen de negocio que ronda los 500 millones de euros.
Crisis por el coronavirus
Durante la crisis del coronavirus, Domus ha recibido denuncias por la gestión de sus asilos en puntos de Madrid, Castilla y León, Cataluña, Galicia y Valencia, y acusaciones de falta de transparencia. Según informó en su momento Crónica Global, el grupo cambió a su empresa de comunicación para solventar el "agujero de reputación" que ha encajado por la pandemia.
La compañía asegura que tomó medidas "extraordinarias" para luchar contra el coronavirus desde "finales de febrero" y que "reforzó" estas medidas en abril contratando "extraordinariamente los servicios de empresas privadas especializadas en procesos de desinfección contra la Covid-19" así como también, a través "de la colaboración en desinfección proporcionada desde las autoridades públicas".