El PNV no respaldará las enmiendas a la totalidad del Presupuesto que se debatirán esta semana en el Congreso de los Diputados, pero tampoco apoyará gratuitamente las cuentas del Gobierno: si el PP quiere el voto de sus cinco diputados, tendrá que ganárselo. ¿Qué pide? Entre otras cosas, la gestión de la Seguridad Social a través de posibles fórmulas intermedias como la cogestión o la asunción de la competencia sin cuestionar la unidad de caja común.
No quiere romper la caja única y que las cotizaciones vascas se utilicen únicamente para pagar las pensiones de los ciudadanos vascos, como parece, pero sí reclama la gestión de las mismas, igual que hace ya con las de desempleo y otras ayudas sociales. Hoy en día todas estas prestaciones las gestiona el Servicio Vasco de Empleo (Lanbide), aunque el dinero proceda de las arcas del Estado.
Los nacionalistas vascos basan su reclamo de conformidad con lo dispuesto en el artículo 18.2 y en la Disposición Transitoria 5 de la Ley Orgánica 3/1979, que aprueba el Estatuto de Autonomía de Gernika, por el que correspondería al País Vasco, en materia de Seguridad Social, la gestión del régimen económico del sistema.
Esto no significa que quieran crear su Seguridad Social propia, aunque algunos expertos creen que pedir la gestión sería solo un primer paso para reclamar, dentro de unos años, un sistema puramente vasco. En cualquier caso, lo cierto es que hoy sería muy difícil asumir un sistema así, sobre todo teniendo en cuenta el déficit total del sistema y la parte que corresponde a la comunidad.
El 20% del déficit total de los fondos de la Seguridad Social en 2017 puede achacarse al País Vasco
Los fondos de la Seguridad Social acabaron 2017 con un desfase de más de 17.200 millones de euros. Del total, unos 3.300 pueden achacarse al País Vasco. Y no acaban ahí las dificultades, la región cuenta hoy con menos de un millón de ocupados y casi 550.000 pensionistas, lo que arroja un ratio de 2 afiliados por cada beneficiario, una cifra inferior a la media nacional (2,23 cotizantes por pensionista al cierre de 2017).
Además, los ciudadanos vascos disfrutan de las pensiones más elevadas del sistema. La pensión media en esta región está en 1.161 euros, por encima de los 934 euros que marca la media nacional. Solo en el País Vasco, Asturias, Navarra y Madrid la pensión media supera los 1.000 euros. Si tuvieran un sistema propio, casi toda probabilidad tendrían que reclamar cotizaciones más altas a sus empresas y trabajadores.
Y es que uno de los principios en los que se basa la Seguridad Social es el de la solidaridad. En España hay un sistema de reparto en el que las cotizaciones de los trabajadores financian a los pensionistas con aportaciones a un sistema que en un futuro les dará protección a ellos. En un primer vistazo parece que cuantos más trabajadores aporten al sistema, más fácil será pagar las pensiones.
Ciudadanos no lo acepta
Sin embargo, los expertos que defienden el sistema de pensiones puramente vasco argumentan que la región está en una clara ventaja en términos de administración, fraude, empleos y sueldos. Creen que la solidaridad del sistema actual hace que los recursos del País Vasco se destinen a otras comunidades. En este artículo de El Correo de hace un año se puede conocer de primera mano la opinión de tres expertos de la materia con opiniones muy diversas.
Lo que está claro es que el tema va a traer cola esta semana porque Ciudadanos ya ha dicho que no apoyará las cuentas si el PP concede al PNV la gestión de la Seguridad Social. "Esperamos que PP y PSOE no otorguen nuevos privilegios al PNV. Si el pacto de PNV para apoyar los Presupuestos supone dar privilegios a los presos etarras y romper la caja única no apoyaríamos presupuestos", sentenció este lunes el secretario general del partido, José Manuel Villegas.