La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) ha validado el despido de 200 empleados de Halcón-Avoris tras pedir una auditoría para concederle los 240 millones de euros de rescate solicitados por las dos compañías fusionadas.
El ente público ha contratado a corporación Capgemini para que valide el plan de negocio presentado por ambas compañías, cuyos propietarios, Globalia y Barceló, aprobaron en diciembre la fusión.
Sin embargo, la integración de las dos agencias de viajes está condicionada al préstamo de la institución pública, que impone una serie de prohibiciones en relación a los despidos.
No obstante, aunque inicialmente la fusión no contemplaba ni reducciones en la plantilla ni cierre de sucursales, los grupos propusieron ajustes de costes para sobrevivir a la crisis provocada por la covid-19.
Según 'El Confidencial', Barceló acordó con Globalia reducir la plantilla en alrededor de 600 personas, cerca del 10% de la fuerza laboral resultante de la integración, 6.000 empleados en total.
Un alto porcentaje de trabajadores se mantendrá en ERTE por causa mayor y, posteriormente, se pondrá en práctica otro de carácter organizativo hasta que se recupere la demanda previa a la pandemia de coronavirus.
SEPI ha rechazado este número de despidos, pero sí que ha autorizado que salgan unas 200, es decir, el 3,3% del total. El coste se financiará parcialmente con parte de esos 240 millones que han solicitado como rescate.
Se mantiene el ERTE hasta finales de 2021
Además, un alto porcentaje de los trabajadores se mantendrá en ERTE por causa de fuerza mayor hasta, previsiblemente, finales de este 2021.
Posteriormente, se pondrá en práctica otro de carácter organizativo hasta que se recupere la demanda existente antes de la pandemia de coronavirus.