“En función de la evolución de las circunstancias, el Oferente (Ganz-Mavag) podrá considerar, en su caso, volver a presentar una oferta para la adquisición del 100% de Talgo”, explicaban los inversores húngaros en su renuncia a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Esto quiere decir que se retiran, de momento. Ahora sus esfuerzas se centrarán en la batalla legal contra el Gobierno.
El consorcio de inversores húngaros, liderados por el fabricante de trenes Grupo Magyar Vagon, explicaba este jueves en una carta al regulador del mercado que tiene intención de iniciar “todas las acciones legales” a su alcance, tanto a nivel nacional como en el seno de la Unión Europea, para “oponerse a dicha decisión que considera no ajustada a Derecho y defender la legitimidad de su oferta pública voluntaria de adquisición sobre el 100% de Talgo”.
En particular, y sin perjuicio de cualesquiera otras acciones legales que resulten procedentes, su plan es interponer el correspondiente recurso contencioso-administrativo ante la Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Supremo contra la decisión del Consejo de Ministros, instando su nulidad y la indemnización de todos los daños y perjuicios causados.
El plazo legal para interponer dicho recurso es de dos meses, plazo durante el cual los inversores húngaros analizarán y determinarán las actuaciones procedentes para la defensa de sus “legítimos intereses”, tal y como definen, incluyendo la petición de las medidas cautelares. “Todo lo anterior, tal y como se ha mencionado anteriormente, sin perjuicio de las restantes actuaciones que procedan en otras instancias, en particular, ante los órganos competentes de la Unión Europea”, destacan.
Volver a por Talgo
Ganz-Mavag considera que la decisión el Gobierno de España no se ajusta a Derecho y sigue pensando que su oferta era atractiva para los accionistas de Talgo “a los que se está privando ilegítimamente de dicha posibilidad”, denuncia ante la CNMV. Además, considera que esta propuesta aseguraba “el mejor interés de la compañía y todos sus grupos de interés”. Por lo que, en función de la evolución de las circunstancias, valoran volver a presentar una oferta para la adquisición del 100% de Talgo.
De momento, abandonan su OPA por Talgo. Una decisión que se basa en los graves perjuicios de la decisión del Gobierno de España para sus intereses y la incertidumbre que la decisión plantea sobre los plazos de la oferta y los costes de mantener su vigencia.
