El Tribunal de Cuentas ha detectado en su auditoría al Instituto de Cinematografía y Artes Audiovisuales (ICAA) de 2011 vulneraciones de la legislación vigente al camuflar como temporales varias contrataciones a largo plazo y estructurales.
En cinco ocasiones se suplió la carencia de personal con la figura de colaborador social, en lugar de realizar una convocatoria pública, y se firmaron 43 contratos de asistencia técnica para realizar actividades estructurales, lo que supuso unas “relaciones laborales encubiertas” que dieron lugar a indemnizaciones por valor de 1,2 millones de euros, según refleja el informe que publica el Tribunal de Cuentas, recogido por Efe, a lo que el ICAA ha explicado que “no se ha vuelto a producir esa situación” y que ha tenido lugar un “proceso de regulación que ha llevado aparejado el pago de indemnizaciones por despido”.
Respecto a la figura del “colaborador social”, el instituto argumentó que es común en la administración, que ha disminuido, y en agosto de 2014 solo quedarán siete.
Fuentes del ICAA indicaron que las deficiencias del informe de fiscalización ya se han subsanado o están en vías de corregirse
El Tribunal ve la vulneración de la Ley de contratos de sector público, cuando el Instituto financió en dos facturas, por 16.351 y 4.737 euros, dos contratos menores con el mismo proveedor para la compra de equipos de sonidos del Cine Doré de Madrid. Fuentes del ICAA indicaron que las deficiencias señaladas por el Tribunal de Cuentas en su informe de fiscalización ya se han subsanado o están en vías de corregirse y que la adquisición de los equipos de sonido eran “dos compras separadas en el tiempo para adecuar el sonido de diferentes salas de proyección”.
Deficiencias en las subvenciones
En su informe, el máximo órgano fiscalizador de las cuentas públicas también advierte sobre algunas deficiencias en la concesión de subvenciones -incongruencias en las bases reguladoras o infracciones de normativa en cuanto a plazos- y la necesidad de reforzar los mecanismos de control de inventarios. Y también insta al ICAA a fortalecer su política de restauración y conservación de los fondos fílmicos.
Sobre las subvenciones, el ICAA afirma que en 2013 elaboró un plan estratégico para el periodo 2014-2015, y que lleva tiempo trabajando en la modificación de la orden ministerial sobre el reconocimiento del coste de películas, parte fundamental en la gestión de esas ayudas.
