José Luis Feito, presidente del Instituto de Estudios Económicos (IEE), think tank de la CEOE, ha expresado durante la presentación del informe del sector inmobiliario en España que el ajuste de precios de la vivienda está llegando a su fin y que el precio subirá a partir de 2015, pese a que aún existe una caída pendiente entre el 5 y el 10 por ciento, según la OCDE.
Feito ha cuantificado el ajuste en un 35% desde 2008 y ha considerado que aún hay potencial de caída en algunas zonas, aunque ya se esté percibiendo un crecimiento en otras, y espera que los próximos 18 meses se produzca una subida de precios de los inmuebles absorbiendo una parte sustancial del “stock” generando así una subida que sorprenda, según informa EFE.
Estas declaraciones se enmarcan en un escenario que refleja 5 años consecutivos de caídas en el sector, en un contexto en el que la inversión de vivienda cerró 2013 representando el 5,9% del PIB, la mitad que antes de la crisis, una reducción similar a la del sector, en donde además la edificación de viviendas a cierre de 2013 cayó un 90% de los niveles previos a 2008.
En este entorno Feito no augura que la edificación se ponga en marcha ni que la oferta supere su estancamiento, cuyo porvenir estará definido por tipos bajos, escasa inflación, creación intensa de empleo e intensificación de la demanda extranjera.
Demanda
El presidente de la Asociación de Promotores constructores de España (APCE), José Manuel Galindo, cree también que el precio de la vivienda ha alcanzado su punto más bajo, pero discrepa con respecto a la demanda, de la que cree que quedan muchas cosas por ver.
El presidente ha advertido que la demanda de vivienda puede acarrear una estandarización de la emancipación juvenil a nivel europeo y a pesar del fin del ajuste, la concesión de créditos, así como el nivel de deuda de los agentes económicos y el ritmo de creación de empleo indican la fragilidad de la demanda.
El informe señala que no se esperan grandes cambios a corto plazo, aunque las perspectivas económicas más optimistas prevén un inicio de la recuperación económica. Además el informe remarca la aparición de una vivienda retenida o embalsada, como consecuencia de la formación de hogares y la emigración temporal que puede pasar a ser demanda real.
