El debut bursátil más importante del año tuvo este martes un color verde intenso y el gigante del comercio electrónico Grupo Alibaba consiguió en su primera sesión en Hong Kong, su simbólica "vuelta a casa", subir un 6,59 %.
Al cierre de la jornada, el precio por acción de la compañía se elevó hasta los 187,6 dólares de Hong Kong (21,7 euros, 23,9 dólares) desde los 176 dólares de Hong Kong (20,4 euros, 22,5 dólares) marcado para su lanzamiento.
Según datos ofrecidos por HKEX, el operador del parqué hongkonés, durante toda la jornada se negociaron 13.660 millones de dólares de Hong Kong (1.745 millones de dólares, 1.583 millones de euros) en acciones de la firma.
La empresa fundada por Jack Ma, quien hoy ya no ocupa su presidencia, comenzó el día subiendo fuertemente, una tendencia que se mantuvo durante las cinco horas y media que está abierto el parqué de referencia de Asia.
La salida a bolsa en Hong Kong es la segunda para Alibaba, que ya cotiza en Nueva York desde 2014, cuando protagonizó la mayor Oferta pública inicial (OPI) de la historia. Es además la mayor del año a nivel internacional, a la espera de lo que pueda ocurrir con la petrolera estatal saudí Aramco.
Según informó hace unos días el grupo, tras confirmar la noticia, la oferta comprende 500 millones de títulos, aunque los suscriptores internacionales podrán ejercer una opción de sobreasignación de otros 75 millones de acciones, valorando la operación en hasta 101.200 millones de dólares hongkoneses (12.931 millones de dólares, 11.686 millones de euros).
Una vuelta a casa
Los títulos se han negociado en lotes de cien y cada uno de ellos equivale a ocho de los cotizados en Nueva York, ya que la empresa aprobó el pasado mes de julio desdoblarlos en esa proporción.
La empresa cotizará dentro del índice HSCI y no del índice principal de la bolsa hongkonesa, el Hang Seng, ya que no cumple algunos requisitos como la estructura de sus acciones, con derechos de voto desiguales.
La llegada a Hong Kong del gigante tecnológico, fundado hace veinte años en la ciudad de Hangzhou (este de China) ha sido vista en la urbe como una "vuelta a casa", tal y como declaró hoy en la ceremonia de apertura el director ejecutivo de HKEX, Charles Li Xiaojia.
"La inclusión de Alibaba hoy es un hito. Es mejor tarde que nunca. Ha necesitado esperar cinco años, pero finalmente la compañía está cotizando aquí y vemos a un miembro de la familia volviendo a casa", apuntó.
Una vuelta que además se produce en un complicado momento para la urbe por las protestas prodemocráticas que han ocasionado en los últimos meses numerosos choques violentos entre policía y manifestantes, una situación cuyo final no se vislumbra y que está teniendo consecuencias para la economía de la ciudad (en recesión técnica) y los mercados.
El propio Daniel Zhang, actual director general de Alibaba, abrazó hoy a la urbe en su discurso.
"Quiero agradecer especialmente a Hong Kong y a la Bolsa de Hong Kong. Como resultado de la continua innovación y los cambios en el mercado de capitales de Hong Kong, podemos darnos cuenta de lo que lamentablemente nos perdimos hace cinco años. Hoy nos dimos cuenta de lo que dijimos entonces: 'Cuando las condiciones lo permitan, volveremos a Hong Kong'", dijo el directivo.
La entrada en el parqué hongkonés era, según dijo en 2013 el cofundador de la firma Joe Tsai, la "primera elección natural" de Alibaba, aunque algunas normativas y restricciones existentes entonces en la urbe asiática hicieron que finalmente se optase por Nueva York.
Alibaba cotiza en Hong Kong bajo el código "9988", cifra cuya pronunciación en chino tiene un sonido similar a la frase "prosperidad para siempre", una elección que da muestras del simbolismo por el que siempre ha apostado la empresa, encabezada hasta el pasado septiembre por el histriónico Jack Ma, hoy uno de los hombres más ricos de China.
