La concesión de nuevo crédito a las pymes, que representan el 99% del tejido empresarial español, se ha endurecido. La subida de tipos de interés se suma a los costes más altos en los insumos y en los salarios que ya afrontan los pequeños y medianos empresarios. En este contexto, están experimentando una restricción por parte de la banca, especialmente aquellos con menos volumen de negocio y trabajadores, más susceptibles en estos escenarios de menores márgenes e incertidumbre económica.
Según los cálculos de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), en el último trimestre de 2022 las pymes captaron 15.900 millones menos de lo que habrían recibido en el periodo prepandemia. Este cálculo resulta del peso relativo que tienen los nuevos créditos sobre las ventas de las empresas, que entre 2017 y 2019 ascendía al 20% y entre octubre y diciembre se dedujo al 15%.
El otorgamiento de nuevos créditos a pymes en el cuarto trimestre llegó a 46.200 millones (sin incluir líneas de crédito ni descubiertos). A priori, esta cifra está alineada con el montante otorgado en los años de normalidad, previos a la pandemia, Sin embargo, la patronal avisa de que ese dato puede trasladar "la errónea impresión de que la situación de la financiación es satisfactoria".
Según la patronal, si se toman como referencia las ventas (mayores ahora que en 2017-19), para igualar el 20% de financiación de aquel periodo, la concesión total de crédito a las pymes debería ser un 34% superior. Es decir, debería haber alcanzado los 62.100 millones, 15.900 millones más. "Se mire por donde se mire está claro que las pymes están sufriendo una restricción de crédito", señalan.
El Banco de España (BdE) ya advirtió a principios de año de que la percepción de las pequeñas y medianas empresas sobre su acceso a la financiación bancaria reflejaba un deterioro por primera vez desde el final de la crisis financiera, desde 2013. "Teníamos la percepción de que las pymes tenían dificultades de acceso al crédito, pero queríamos corroborarlo. Efectivamente, el volumen de crédito generado se ha visto disminuido", confirman desde Cepyme.
Subida de tipos
En su informe, el Banco de España también advertía de que las pymes esperaban una "notable intensificación del deterioro" de los préstamos en el primer trimestre del 2023. "Pese al drástico incremento, los actuales niveles de tipos de interés para las pymes no recogen en su totalidad la aún más marcada subida del euríbor", advierte la patronal de las pequeñas y medianas empresas.
"Para el plazo de 12 meses, el euríbor pasó de una media de -0,35% en el primer trimestre de 2022 a +2,83% de media en el cuarto. Los primeros meses de 2023 ratifican la tendencia ascendente de los tipos de interés: el euríbor cerró febrero con una media superior a 3,5%, el mayor dato desde 2008", recuerda Cepyme. La pasada semana el Banco Central Europeo (BCE) decidió subir los tipos de interés en medio punto porcentual, llevando el precio del dinero del 3% al 3,5%.
En una intervención reciente, el gobernador del BdE, Pablo Hernández de Cos, avisaba de que "la contención de la carga financiera de las empresas ha venido facilitada en parte por la transmisión todavía incompleta de las subidas de tipos de interés de la política monetaria al coste de los préstamos bancarios". Sin embargo, conforme esta transmisión avance, "es esperable un aumento de la proporción de empresas sometidas a presión financiera elevada".
En concreto, el BdE estima que ascensos en los tipos de interés de mercado de 400 puntos básicos, algo mayores que los registrados en el Euribor a 12 meses durante 2022 (350 pb, aproximadamente), supondrán un incremento de la carga financiera mediana bruta de las empresas con deuda de entre 4,3 y 8,7 puntos porcentuales. Estas subidas se podrían incrementar en entre 0,7 y 1,7 puntos adicionales si la subida del euríbor llegara a los 500 pb.
Bajo ese mismo escenario, la proporción del total de deuda corporativa en manos de empresas con presión financiera elevada (la ratio resultado económico bruto e ingresos financieros entre gastos financieros es menor que uno), que se situaba algo por debajo del 15% antes del inicio de la crisis actual, se incrementaría entre 6,9 y 9,5 puntos porcentuales. Para una subida de 500 puntos básicos, estos porcentajes se elevarían a un rango entre 7,3 y 12,8 puntos.