Si lo que pretendía José María Orihuela con su carta a la banca era ablandar las posiciones de las entidades financieras, el efecto conseguido ha sido todo lo contrario.
El consejero delegado de Duro Felguera envió hace pocos días una carta a los mayores bancos españoles, que también son los principales financiadores y acreedores del grupo asturiano, requiriendo una quita del 85% de una deuda de unos 85 millones. Pero los bancos ni siquiera han respondido a la propuesta, no lo van a hacer, y consideran que ha sido un intento de presión al filtrarse la iniciativa.
Distintas fuentes financieras consultadas por Vozpópuli aseguran que el envío de la carta con la solicitud "no se ha visto nada bien". "Ha sido una mala opción, Orihuela no está haciendo amigos precisamente entre los que sí o sí va a necesitar para mantener el negocio", comentan.
Duro Felguera firmó a mediados de 2017 un contrato en Dubai valorado en 204 millones para ampliar una central eléctrica
Las entidades acreedoras de Duro Felguera, lideradas por Santander, también BBVA, Caixabank, Sabadell y Bankia, insisten en que la solución para la compañía tiene que venir por un nuevo plan de negocio y la entrada de un socio industrial o financiero que inyecte capital. Y recuerdan que en los últimos años ya han asumido quitas por un importe total cercano a los 300 millones de euros.
Obra en Dubai
La situación del grupo industrial, que emplea a cerca de 2.000 personas, es crítica, a pesar de que registró en el pasado ejercicio un beneficio de 10,9 millones de euros (frente a unas pérdidas en 2018 de 119 millones descontando la inyección lograda en una ampliación de capital). El grupo tiene abiertos frentes nacionales e internacionales que generan gran incertidumbre.
La compañía afronta una investigación en la Audiencia Nacional por presuntas prácticas corruptas en Venezuela; una reclamación de Hacienda de 123 millones. En Australia, se ha iniciado ahora el proceso concursal de su filial, y en Dubai afronta otro posible conflicto con Dubai Bank.
De acuerdo a fuentes financieras y también otras cercanas a la compañía española, Dubai Bank y Duro Felguera están enzarzados en arbitrajes y posibles ejecuciones de avales por importe de 48 millones de euros. El grupo español, que no comenta esta información, firmó a mediados de 2017 una obra en Dubai para ampliar una central eléctrica valorada en 204 millones de euros.
