Cepsa busca sacar el mayor partido a sus plantas renovables. La energética ha sacado al mercado una cartera de plantas renovables con un total de 800 megavatios (MW), en una puja entre varios candidatos para poder sacar valor a estos activos. Una tarea para la que ha contratado los servicios de Banco Santander, según confirman a Vozpópuli fuentes conocedoras del proceso.
Una operación que recuerda a la anunciada por otras energéticas como BP, Repsol o Iberdrola. La decisión respondería a una rotación de parte de la cartera para afrontar las inversiones necesarias que Cepsa está acometiendo en otros proyectos de energías limpias, como el hidrógeno verde o los biocombustibles, donde ha presentado planes de inversión por 5.000 millones.
Ni Cepsa ni el Banco Santander han querido hacer comentarios sobre esta operación ante la consulta de Vozpópuli. Estas plantas renovables son, mayoritariamente, proyectos solares y están localizadas en Andalucía, donde la energética cuenta con la mayor parte de su generación 'verde'. En total, Cepsa tiene 2,1 gigavatios (GW) de energía renovable conectados a la red y su objetivo es, según su plan estratégico, desarrollar para 2030 una cartera de solar y eólica con una capacidad de 7 GW.
Desde el mercado aseguran que esta cartera rondaría un valor de 1.000 millones de euros. Una estimación que se fundamenta en el reciente acuerdo de 1.265 MW que ha alcanzado Iberdrola con Norges Bank, que valoraba esta cartera en 1.225 millones de euros. Las mismas fuentes esperan que Santander consiga una valoración cercana a los 1.000 millones tras conocer, según adelantaba El Confidencial, que Repsol espera lograr entre 700 y 800 millones de euros en la búsqueda de un socio minoritario para su cartera verde de 600 MW en España.
Las alianzas y rotación de activos se han convertido en la estrategia elegida por las grandes compañías energéticas para financiarse y seguir desarrollando su cartera de renovables. En el plan estratégico que la compañía presentó el año pasado, se estableció el objetivo de garantizar para sus procesos energía de origen 100% renovable. Una estrategia que planteó realizar con el desarrollo de producción propia con parques solares o eólicos y con acuerdos con terceros, como los alcanzados con EDP o recientemente con Ibereólica. La idea de Maarten Wetselaar, consejero delegado de Cepsa, es contar con flexibilidad y optimizar el perfil de generación y precios de la energía producida y consumida.
Cepsa revisa sus activos
La energética sigue actualizando su negocio para afrontar su proceso de descarbonización. Cepsa anunció en marzo la venta a la francesa TotalEnergies de su negocio de Exploración y Producción en Emiratos Árabes Unidos. Una cartera de activos que se compone de dos participaciones en dos sociedades concesionarias localizadas en Abu Dhabi. Un anuncio que se produjo un año después de paralizar su proceso de venta de su división Química.
Tras la llegada de Wetselaar en 2022, la compañía está inmersa en un proceso de transformación con el objetivo de convertirse en líder en movilidad sostenible, la producción de biocombustibles e hidrógeno verde en España y Portugal, y ser un referente de la transición energética.
Para alcanzar este objetivo, la energética que controlan Mubadala y el fondo Carlyle se ha comprometido a invertir hasta 8.000 millones de euros en esta década, de los que un 60% se destinará a negocios sostenibles a partir de 2023.
Su objetivo es que los negocios ‘verdes’ se conviertan en el motor del resultado bruto de explotación (Ebitda) de la compañía, pasando del 14% en 2022 a más de la mitad en 2030. Su plan con esta operación es tomar impulso para seguir logran este trasvase de la gasolina a los productos verdes.