No es el primer caso de una empresa que se hace famosa por una actividad que poco o nada tiene que ver con la original por la que fue fundada; y aunque Nintendo suele usarse de ejemplo, lo cierto es que, al contrario que otras como Nokia o Samsung , siempre ha estado en el mismo sector: el juego y el entretenimiento. Tanto sus inicios como su evolución tienen en común un mismo apellido: Yamauchi.
Curiosamente, el fundador de Nintendo, Fusajirō Yamauchi, nace en 1859, en Kioto, con otro apellido: Fukui, primogénito de su padre Sosuke. Se lo cambia cuando es adoptado en 1872 por Naoshichi Yamauchi, que es el que introduce a Fusajirō en su primer trabajo: la empresa de cemento Haiko Cement Company. Fusajirō Yamauchi fundó una empresa de naipes el 23 de septiembre de 1889 como Nintendo Koppai y no se conocen detalles de por qué eligió ese producto ni cómo obtuvo la financiación. Lo que sí se sabe es que el Gobierno japonés prohibía los juegos de azar por lo que hizo una excepción con los naipes de Yamauchi, quizás porque eran Hanafuda (literalmente cartas de flores), de estilo tradicional japonés.
Al ser el único productor autorizado en ese momento la empresa tuvo mucho éxito, y fue inevitable que sus naipes fueran usados en partidas de cartas ilegales, algunas protagonizadas por los yakuza. En 1902 es pionera en vender en Japón barajas occidentales (principalmente la inglesa) fabricadas allí.
Fusajirō, del que realmente se sabe muy poco, se jubila en 1929 y abandona totalmente la gestión de su empresa, encargando al marido de su única hija, Tei Yamauchi, que le sucediera en Nintendo. Éste, que se llamaba Sekiryo Kaneda, adopta el apellido de su esposa el día de su boda (aunque seguramente lo hiciera por su suegro y para asegurarse la sucesión) por lo que su descendencia seguiría llevando el apellido del fundador. Este segundo presidente de Nintendo mantuvo a la compañía saneada manteniéndola como la productora de cartas más importante del país, renombrándola en 1933 como Yamauchi Nintendo Co. Ltd. Probablemente, su mayor mérito fue que consiguió que la empresa sobreviviera a la Segunda Guerra Mundial.
El nieto de Fusajirō se llamaba Shikanojo y estaba destinado a ser el sucesor pero en 1933 abandona a su esposa y a su hijo y cae en desgracia. Ese hijo, nacido en 1927 y de nombre Hiroshi Yamauchi, es criado entonces por sus abuelos, que son la hija del fundador y el presidente de la compañía, por lo que pronto queda marcado como sucesor de la saga. En 1949 Sekiryo sufre una apoplejía y Hiroshi, sin tener aún cumplidos los 22 pero casado desde los 18 en un matrimonio concertado por el abuelo Sekiryo, asume el mando de Nintendo.
Él es el responsable de transformar totalmente la antigua fábrica y distribuidora de naipes en lo que se convirtió después. En 1951 la compañía pasa a llamarse Nintendo Playing Card Co. Ltd. Y en 1953 empieza a usar masivamente el plástico en las cartas.
Primeras barajas para niños
Hiroshi Yamauchi es un jefe tiránico que tarda años en encontrar el rumbo adecuado para la compañía. Fracasa con una compañía de taxis porque se niega a subir el sueldo a los conductores, también construyendo un “love hotel” al estilo de los moteles estadounidenses, pero acierta cuando en 1959 empieza a vender cartas con personajes de Walt Disney impresos, ampliando enormemente el mercado de las barajas para niños. En 1962 Nintendo empieza a cotizar en la segunda sección (algo así como un mercado menor) de las bolsas de Osaka y Kyoto, pasando a la primera sección en 1970. Antes, en 1963, Yamauchi vuelve a cambiar el nombre de la empresa, esta vez de manera definitiva y a como la conocemos hoy: Nintendo Co., Ltd.
El primer producto que fabrica la “nueva” Nintendo son paquetes de arroz instantáneo. El negocio resulta un fracaso, sin embargo un año después crea la división de Juegos, dedicada al desarrollo de juegos y juguetes. El primer producto que sale de este departamento es el Rabbit Coaster. Aquí es donde podemos situar la prehistoria de la moderna Nintendo.
En 1970 Nintendo se alía con el fabricante japonés de tecnología Sharp para usar tecnología de sensores de luz, poniendo a la venta una pistola que emite luz y una diana que reacciona a ella. De este modo, es pionera del uso de componentes electrónicos en juegos infantiles. En 1973 Nintendo compra varias boleras abandonadas en el país y las convierte en Laser Clay Shooting System, locales en los que se usaría la tecnología de las pistolas de rayos para disparar a pájaros hechos de luz.
El gran acierto de Nintendo
Ese negocio proporcionaría mucho dinero y popularidad a la empresa pero la verdadera evolución de Nintendo llega cuando, en 1975, se convierte en distribuidora de la videoconsola estadounidense Magnavox Odyssey, ve el negocio, y en 1977 crea su primera videoconsola, en colaboración con Mitsubishi Electric. Ahí empieza su andadura como fabricante de videojuegos, en 1979 abren oficina en Nueva York y en 1980 comercializan el juego Donkey Kong, que en 1981 bate récords mundiales en salas recreativas, al igual que Super Mario Bros en 1985. En 1989 aparece Game Boy, la primera consola portátil con cartuchos de juego intercambiables, que no dejará de mejorar tecnológicamente con el tiempo. En 1999 conquista el mercado mundial con Pokémon y el resto ya es historia reciente.
Hiroshi Yamauchi (como ejemplo de su curiosa personalidad, compró el equipo de béisbol de los Seattle Mariners, pero nunca asistió a un solo partido de su propio club). Dejó el cargo de presidente en 2002 y cuando en 2005 se jubiló definitivamente, renunció a los millones de euros que la empresa le ofreció como prima de jubilación porque “Nintendo podrá dar mejor uso a ese dinero”. Cuando murió en 2013 aún estaba entre las 500 mayores fortunas del mundo, según Forbes.