Tras unos meses de dilación por recursos y recusaciones, la mayor concesión a concurso en España entra en su recta final. Este jueves está prevista en Alcobendas la apertura de sobres con la valoración de las ofertas para un nuevo "complejo medioambiental" de gestión de residuos en la Comunidad de Madrid, en Colmenar Viejo. Un proyecto que ha despertado el interés de varios de los principales actores de la industria nacional de las infraestructuras.
La alianza entre la constructora Fomento de Construcciones y Contratas del mexicano Carlos Slim y la Ibex Acciona de la familia Entrecanales es vista en el mercado como la gran contendiente en la puja milmillonaria junto a Urbaser. La constructora que el fondo americano Platinum ha puesto recientemente en la cartelera de los grandes capitales no deja de ser la que tiene mayor experiencia en materia de residuos en Colmenar Viejo al ser la que ha venido gestionando el vertedero urbano de la zona hasta ahora, según inciden algunas de las fuentes consultadas.
Por su parte, FCC viene de lograr la rápida puesta en marcha del "primer complejo medioambiental de reciclaje" de la Comunidad de Madrid, en Loeches, que está siendo tomado como referencia técnica para la reforma de los vertederos urbanos existentes en la región, tanto el mismo de Colmenar como el de Pinto -donde opera también la constructora de Slim-, reseñan otras fuentes. En el entorno de Loeches también ha ganado presencia recientemente la propia Acciona.
MS, Schwarz y Valtalia quieren dar el golpe
Al margen de Urbaser y la unión FCC-Acciona, también se han interesado por la que es la mayor concesión del año en el país otras entidades de fuste, en su mayor medida, con apoyo de capitales internacionales.
Entre los contendientes aparece la firma PreZero, del grupo alemán Schwarz, con creciente presencia en el sector medioambiental en Madrid. Otra que ha presentado sus credenciales es la compañía Valoriza que el gigante estadounidense Morgan Stanley compró a Sacyr por 743 millones de euros en 2023, poco antes de que se iniciara precisamente la megalicitación para la reforma del vertedero en Colmenar.
De la puja milmillonaria finalmente se han descolgado otros históricos nacionales, como ACS y OHLA, pero se ha mantenido con un lugar el grupo gallego Valtalia, especializado también en residuos, a través de la histórica marca Espina Obras Hidráulicas.
Concesión de 20 años
La licitación, que se espera cerrar formalmente antes de que acabe este 2024, está siendo gestionada por la Mancomunidad de municipios del noroeste de Madrid. La obra deberá brindar servicios a cerca de un millón de personas y recibirá financiación con cargo a los fondos europeos Next Generation.
El alcalde de Colmenar Viejo y Presidente de la Mancomunidad, el popular Carlos Blázquez, ha puesto en marcha la concesión en coordinación con el Gobierno regional de la Comunidad de Madrid, aunque en términos diferentes a los que ha llegado a plantear la Oficina Nacional de Evaluación (ONE) del Ministerio de Hacienda. Esta última entidad que supervisa la contratación pública comenzó a funcionar en diciembre de 2021, en el marco de la activación del Plan de Transformación y Resiliencia tras la pandemia, aunque sus informes no son vinculantes.
La concesión en Colmenar promete un resultado operativo de 252 millones al cabo de 20 años a los potenciales concesionarios en torno a una licitación valorada en unos 1.091 millones de euros en total con impuestos, por los 625 millones en 14 años que propuso la ONE.
La concesión en Colmenar Viejo promete un resultado operativo de unos 252 millones al cabo de 20 años a los potenciales concesionarios en torno a una licitación valorada en unos 1.091 millones de euros en total con impuestos, por los 625 millones en 14 años que la ONE consideraba suficientes.
La Mancomunidad ha alegado cuestiones internas del proyecto así como los criterios de la 'ONE regional' de Madrid y los inminentes compromisos medioambientales que pesan sobre la zona para acelerar la licitación bajo sus términos y conseguir el inicio de las obras antes del 15 de mayo de 2025, como requiere la Autorización Ambiental Integrada (AAI) que rige las instalaciones de la administración madrileña.
