La crisis económica que ha provocado el coronavirus ha golpeado al mercado laboral, provocando la pérdida de medio millón de empleos desde marzo.
Sin embargo, su impacto ha sido muy heterogéneo por sectores y también por provincias, siendo el interior del país y las zonas de la llamada 'España vaciada' las que menos empleos han perdido en términos relativos y en las que menos trabajadores han acabado en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).
Si se compara la evolución de lo que el Banco de España llama afiliación efectiva (el número total de afiliados sin tener en cuenta a los trabajadores que están afectados por ERTE), se observa que las provincias menos pobladas del país son las que han sufrido menores descensos, algo que achacan a "las diferencias provinciales en cuanto a la estructura sectorial" y al menor peso que tienen el turismo y la hostelería en esas zonas.
"En agosto, el descenso interanual del empleo fue más intenso en aquellas provincias con un mayor peso del comercio y la hostelería -fuertemente afectados por las restricciones a la movilidad durante el periodo de confinamiento y cuyos niveles de actividad aún no han podido recuperarse en la misma medida que en otras ramas productivas-, así como del turismo extranjero en el total de la actividad turística, y con un menor peso del sector industrial y de los servicios de no mercado", explica el supervisor en su último informe.
Las provincias con menores pérdidas de empleo han sido Albacete (-3,2% interanual en agosto), Cuenca (-3,5%), Murcia (-3,5%), Huesca (-3,6%), Badajoz (-3,6%), Navarra (-3,7%), Toledo (-3,8%) y Soria (-3,9%); mientras que lideran las pérdidas de empleo Baleares y Canarias.
"Se aprecia que en las provincias costeras del Mediterráneo, en Madrid y, especialmente, en las Islas Baleares y Canarias, la contracción del empleo en términos interanuales se mantuvo en agosto muy por encima de la observada en las provincias del interior", explican. En agosto, la afiliación en Baleares era un 24,4% inferior a la de hace un año; y un 18% y 15,8% inferior, respectivamente, en Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife.
Sectores más afectados
Desde mayo, con la vuelta gradual a la actividad, el empleo ha ido recuperándose poco a poco pero no en todos los sectores de actividad.
"Las ramas de servicios de mercado se encontraban en agosto más lejos de volver a su nivel de empleo de un año antes que el sector industrial y, sobre todo, que la construcción. En los servicios de mercado, aunque la recuperación del empleo ha sido notable en los últimos meses, en agosto la afiliación efectiva aún se situaba casi un 12% por debajo de su nivel de un año antes", precisan.
La hostelería, por ejemplo, ha empleado en agosto a un 12% menos de trabajadores que hace un año; mientras que otras ramas más relacionadas con el turismo (como las agencias de viaje, servicios de alojamiento o servicios de transporte aéreo) mantuvieron en agosto a la mitad de trabajadores. En el comercio y transporte se empleó a un 10% menos.
En el sector industrial también hay muchas diferencias. El empleo ha sido dinámico en la fabricación de vehículos de motor, al pasar de una caída de la afiliación del 35% en mayo a una del 7,3% en agosto, y en la fabricación de productos farmacéuticos, que en agosto empleó a un 0,8% más que en agosto anterior.
Sin embargo, la confección de prendas de vestir o la industria del cuero sí sufrieron pérdida de trabajadores, del 15%.