La reelección de Javier Tebas como presidente de La Liga apoyada por la práctica totalidad de los clubes de primera y segunda división con la excepción de los gigantes históricos Real Madrid, Barcelona y Athletic de Bilbao esconde una incipiente batalla, casi fracticida, por el control del negocio del deporte rey. El propio Tebas ha dado carta de amenaza en su programa electoral a "las reformas de las competiciones europeas" como las que podría suponer la proyectada superliga mundial impulsada por Florentino Pérez que jaquearía el actual establishment Liga+Champions."Durante esta temporada, La Liga ha liderado la oposición a las reformas de las competiciones europeas, hemos liderado la defensa de vuestros activos audiovisuales para que los mismos no pierdan valor. Para poder seguir en este liderazgo, es importante que el presidente que esté lo haga con un mandato de no solo unos meses", incidía Tebas a principios de diciembre cuando, a diez meses de que venciera su cargo, presentó repentinamente una dimisión con el paradójico fin de poder optar rápidamente a garantizarse otros cuatro años más de mandato.Ello, en paralelo a la emergencia mediática del proyecto de superliga mundial del presidente merengue, que se apoya en la estimación de que en una liga de 20 clubes de talla internacional, el Real Madrid ingresaría por derechos de televisión, nacionales y sobre todo internacionales, al menos cuatro veces más que ahora (1.000 millones en lugar de los 250 millones actuales, de los cuales 155 vienen de La Liga), un multiplicador que también valdría para los gigantes que accedan a sumarse a la iniciativa. El Barcelona ha coqueteado con la idea. De momento, el Milan es el único grande europeo que se ha sumado a la Asociación Mundial de Clubes impulsada por Florentino.
La Liga ha liderado la oposición a las reformas de las competiciones europeas. Para poder seguir en este liderazgo, es importante que el presidente que esté lo haga con un mandato de no solo unos meses"
Distintas fuentes del mundo de la inversión y el fútbol reconocen que el proyecto del presidente merengue está en una fase todavía muy incipiente, "muy verde", y que tiene que ganarse todavía el apoyo decidido de la FIFA -la UEFA, en principio, se opone frontalmente-, pero inciden igualmente en que sería "un producto que dispararía el negocio del fútbol" y que contaría con el apetito de importantes fondos de inversión. Las conversaciones a tres bandas entre el Madrid, la FIFA y CVC no son algo ni casual ni puntual.Las mismas fuentes reconocen que la nueva competencia dispararía a los clubes grandes y hundiría a los pequeños pero inciden en que los márgenes de negocio, dados los intereses del conjunto de los consumidores serían suficientemente grandes a favor de una potencial superliga europea/mundial, que acabaría resultando ser un producto más atractivo en cantidad y calidad para un mayor número número de inversores y consumidores. "Así es la vida con la globalización", dice una fuente del mundo de la inversión. "Un modelo tipo NBA adaptado al fútbol en Europa, por ejemplo, sería la bomba".
Mediapro comercializa La Liga en el exterior
"Quién piense que eso es posible, muestra un gran desconocimiento de la industria del fútbol, del mercado audiovisual", defiende igualmente Tebas, tras suscribir las palabras del ahora consejero de la UEFA, Luis Figo. "La rumoreada superliga mundial matará el prestigio y entretenimiento alrededor de las ligas domésticas para los aficionados y jugadores y diezmará los recursos de los equipos medianos y pequeños".Los clubes medianos y pequeños han accedido en masa a respaldar la gestión de Tebas, que lleva tiempo apostando por alianzas con Mediapro, de Jaume Roures, en materia de producción audiovisual del fútbol español, y en especial, en la comercialización de los derechos televisivos de La Liga en el exterior.
Debemos intentar dar a la institución la máxima estabilidad posible, La Liga tiene la enorme responsabilidad de gestionar el mayor activo de los clubes, que son sus derechos audiovisuales"
El acuerdo ahora en vigor entre La Liga y Mediapro prevé 4.485 millones de euros en ingresos para la patronal entre 2019 y 2024, un 30% más que el anterior. La compañía de Roures ingresa alrededor de unos 100 millones anuales en concepto de intermediación, según han apuntado desde la patronal. Todo ello enmarcado en una gestión que abandera la venta centralizada de los derechos y un reparto de los derechos que evita que ningún club acabe ingresando por televisión más de 3,5 veces lo que el que menos."Debemos intentar dar a la institución la máxima estabilidad posible, La Liga tiene la enorme responsabilidad de gestionar el mayor activo de los clubes, que son sus derechos audiovisuales (2.200 millones por temporada). Entre las cuestiones que he aprendido en estos más de seis años al frente de La Liga es que una estabilidad institucional (que no es contradictorio con la defensa de nuestros/vuestros derechos con firmeza) ayuda a mantener la confianza entre las decenas de operadores nacionales (actualmente Telefónica) e internacionales de TV, patrocinadores...y, por lo tanto ayuda a mantener/crecer el valor de nuestros derechos", ha esgrimido Tebas al reclamar con éxito el voto de la mayoría de los clubes para su reelección para los próximos cuatro años.
