El Gobierno quiere prorrogar los ERTE aprobados por la pandemia "tanto como sea necesario". De momento, sobre la mesa pondrá la ampliación hasta el próximo mes de diciembre, a la espera de ver cómo evoluciona la situación del empleo en los últimos meses del año. Según confirman fuentes sindicales consultadas por Vozpópuli, se espera que la primera reunión entre el Ejecutivo y los agentes sociales tenga lugar la semana que viene. La última prórroga, firmada en mayo, termina el 30 de septiembre.
Con el sector del turismo todavía muy afectado por la caída de los visitantes extranjeros y la hostelería sometida a fuertes restricciones en varias comunidades, tanto el Gobierno como sindicatos y empresarios consideran que ampliar el periodo de aplicación de esta herramienta "es lo adecuado".
Según los datos aportados este jueves por el Ministerio de Seguridad Social, a cierre de agosto permanecían en ERTE 272.190 personas, 59.296 menos que a finales de julio, situándose en el punto más bajo desde que comenzó la pandemia. Cabe recordar que, en el punto más alto de 2020, a este mecanismo estuvieron acogidos 3,6 millones de trabajadores.
No obstante, los expertos consultados consideran que el mecanismo tendría que mantenerse hasta final de año por el tipo de sectores más afectados: de las 100 actividades económicas, sólo entre Servicios de Comidas y Bebidas (65.373 trabajadores en ERTE) y Servicios de Alojamiento (39.091), concentran el 38% de los trabajadores protegidos por un ERTE.
Así, y aunque la recuperación del empleo durante el verano ha sido notable, el avance insuficiente de la vacunación para retirar las restricciones y el tradicional menor 'tirón' del consumo durante el otoño hace que la extensión de esta herramienta se esté planteando ya hasta final de año. De hecho, algunos agentes del sector turístico ya han solicitado al Ejecutivo que los ERTE se prolonguen hasta el verano de 2022, algo que todavía no está sobre la mesa.
Sindicatos y patronal, de la mano
Tanto CCOO como UGT defenderán en la mesa de diálogo social que sea el 31 de diciembre la fecha para la que se fije la próxima extensión. Después, explican fuentes sindicales, discutirán en la mesa sobre la reforma laboral la introducción de mecanismos de flexibilidad interna al que las empresas puedan acudir en vez de despedir trabajadores, basado en parte en los ERTE pero con modificaciones.
La prórroga hasta el año que viene también la van a defender las patronales. Por ejemplo, Hostelería de España insiste en que la apuesta debe ser lograr una prórroga hasta 2022, puesto que, recalcan, se deben mantener "hasta que el nivel de normalidad alcance unas cotas que se alejen de la base de inactividad tan alta que sigue habiendo en el sector debido a las restricciones en ocio nocturno, banquetes, el uso de barras, los aforos en interiores y exteriores, y la limitación de horarios". También la organización de autónomos Uatae pidió este jueves al Ejecutivo que los prorrogue hasta entonces, así como la prestación por cese de actividad para autónomos, a la que están acogidos actualmente más de 222.700 trabajadores por cuenta propia.