Macroeconomía

España arranca el año como la gran economía de la UE con más inflación

La inflación en España repuntó al 3,5% en enero, frente a las caídas que experimentaron Francia y Alemania y mientras Italia está ya por debajo del 2%

  • Piezas de ternera expuestas en la carnicería de un mercado, en Madrid (España). -

España fue la gran economía de la Unión Europea con más inflación en enero. La oficina estadística europea, Eurostat, armoniza los datos para todos los países y marca en el 3,5% la subida de los precios anual en nuestro país, un dato que sobrepasa por primera vez en meses el de Francia, Alemania, Italia y Países Bajos.

Esto fue así porque mientras en España la inflación subió en dos décimas (del 3,3% en diciembre al 3,5% en enero), en Alemania bajó en siete décimas (del 3,8% al 3,1%) y en Francia, en siete décimas (del 4,1% al 3,4%). En Italia y Países Bajos la inflación aumentó, pero partían de tasas más bajas (en Italia pasó del 0,5% al 0,9% y en Países Bajos, del 1% al 3,1%).

De hecho, el crecimiento de la inflación en enero en España nos situó ya como el sexto país de la Unión Europea con mayor incremento anual de los precios (inflación), sólo superado por Estonia (5%), Croacia (4,8%), Austria (4,3%), Eslovaquia (4,3%) y Malta (3,6%). En el conjunto de la eurozona la inflación bajó una décima en enero, al 2,9% al 2,8%. El objetivo marcado por el Banco Central Europeo (BCE) es reducirla al 2%.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) explicó esta semana, cuando publicó el dato de inflación en España, que el incremento en enero se debió principalmente al aumento de los precios de la electricidad, en comparación con la disminución de enero de 2023. El tipo de IVA en la luz y el gas ha pasado de estar reducido al 10%, en vez de al 5%. En sentido contrario destacaron los combustibles, cuyos precios disminuyeron, mientras que subieron en el mismo mes de 2023.

En todo caso, la situación podría haber sido peor. El pasado 11 de enero, con la aprobación en el Congreso de la prórroga de las medidas anticrisis, el Gobierno evitó que el IVA de los alimentos volviera automáticamente al 10% o al 4%; el de la luz y el gas, al 21%; y que el transporte público dejara de estar subvencionado. Esto tiene un efecto automático en los precios que pagan los consumidores, y que se reflejan en el IPC.

Si no se hubieran prorrogado las medidas, se hubiese producido un aumento en la inflación de más de un punto porcentual. Es decir, hubiese pasado del 3,1% en diciembre a superar el 4% en enero. El mensaje hubiese sido distinto al que se ha transmitido esta semana, pues hubiese significado retroceder a los niveles de hace un año: la última vez que España registró una inflación superior al 4% fue en abril de 2023.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli