Primark está saliendo airosa de la pandemia; al menos, de momento. La cadena de moda low cost, que ya reincorporó a comienzos de junio a toda su plantilla por la alta demanda, está ahora reforzando sus establecimientos con nuevas contrataciones.
Un refuerzo que, según las ofertas que el gigante irlandés está publicando estos días en su propio portal de empleo, se está haciendo sobre todo para el puesto de dependiente de tienda, ubicadas en su mayoría en centros comerciales de toda España. No en vano, Primark busca personal para más de una treintena de vacantes, entre las que también hay demanda de algún gerente de tienda.
El número está muy por encima de las ofertas publicadas en estos momentos por rivales como Inditex o H&M, y los anuncios de la irlandesa se centran sobre todo en contratos a tiempo parcial. En este sentido, Primark también busca refuerzos para el fin de semana, con el objetivo de complementar su plantilla y hacer frente al crecimiento de clientes.
"Fuera de Madrid, donde esto ya es habitual, en muchos lugares deciden hacer aperturas mayores a partir del black friday, en domingos o festivos, y para atenderlo se requiere más plantilla", explican fuentes sindicales, que señalan que las nuevas contrataciones tendrían también su relación con la campaña de Navidad.
En este sentido, el "aumento de demanda" que está viviendo Primark en centros comerciales contrasta con los datos que arrojan otros establecimientos en estos lugares, donde otras compañías se encuentran renegociando sus alquileres.
La resistencia del 'low cost'
Así las cosas, el gigante de la moda de bajo coste está logrando resistir mejor que otras el huracán del coronavirus. "El modelo low cost se comporta mejor en tiempos de crisis, y es lo que le está pasando a Primark", apuntan desde el sector, que señalan que, en un momento en el que las familias controlan cada gasto y buscan ahorrar más, la oferta del gigante irlandés se adapta mejor a la situación.
En el caso de su porfolio de tiendas, las ubicadas en centros comerciales están comportándose mejor que otras como la emblemática tienda de la Gran Vía madrileña que, con más de 12.400 metros, está acusando la caída del turismo.
"Aunque siguen recibiendo muchos clientes, los autobuses turísticos ya no paran en su puerta para que los viajeros hagan sus compras", señalan fuentes del sector, que apuntan al refuerzo de Primark en el centro comercial como una de sus armas principales.