El fin de las pequeñas aerolíneas europeas está muy cerca. El precio del petróleo y la bajada generalizada de las tarifas están asfixiando a estas compañías de menor poder financiero. Así lo relata a Vozpópuli Alejandra Ruiz, senior communications manager de Ryanair, que se aventura a vaticinar que en cinco años sólo quedarán cinco o seis grandes grupos en Europa: "El grupo Ryanair, IAG, Air France-KLM, Lufthansa, Easy Jet y probablemente Gulf Air.
Ruiz explica que la presión por el precio del petróleo y la sobrecapacidad que existe ahora en el mercado está provocando que las aerolíneas pequeñas no sean capaces de cubrir su factura de combustible con antelación, tengan problemas financieros y se vean envueltas en procesos de insolvencia.
La directiva de la compañía irlandesa explica su propia experiencia con la aerolínea Niki, fundada en 2003 por el piloto de Fórmula 1 recientemente fallecido Niki Lauda y absorbida en su totalidad por Ryanair hace unos meses bajo la marca LaudaMotion. "Lauda opera en Austria, Alemania y Suiza y Ryanair la compró para convertirla en la primera aerolínea low cost que opera en esos países hacia destinos de sol y playa".
Aunque lo cierto es que no es la única. En los últimos meses han sido varias las aerolíneas que han dejado de operar, como la alemana Small Planet en septiembre y la danesa Primera Air y la chipriota Cobalt Air en octubre de 2018. Germania y la británica Flybmi también se declararon en quiebra en febrero de este año, a las que se sumó un mes más tarde la islandesa Wow Air.
"Ni Thomas Cook ni Norwegian"
Es una sangría que no cesa. Ahora hay varias firmas que suenan con fuerza para ser adquiridas, como Norwegian o el negocio aéreo de Thomas Cook, en la que Ryanair asegura no estar interesada. Sin embargo, el grupo IAG -integrado por Iberia, Aer Lingus, Vueling y British Airways- sí podría barajar una OPA sobre la aerolínea noruega, así como Lufthansa, que también ha hecho público su interés por Condor, la aerolínea de Thomas Cook, y por el resto de sus divisiones aéreas.
La portavoz de Ryanair adelanta que la estrategia de su grupo "no es comprar grandes compañías, sino pequeñas aerolíneas que podamos hacer crecer de manera orgánica, como hemos hecho con LaudaMotion; o crear aerolíneas de cero, consiguiendo certificados de operador aéreo en varios países, como hemos hecho en Polonia con Ryanair Sun", que pasará a llamarse Buzz.
Además, Ruiz explica que hay otra opción: que estas empresas afectadas por sus 'números rojos' se disuelvan y vendan sus activos, "sobre todo los slots, los derechos de despegue y aterrizaje, uno de los activos más valiosos para las aerolíneas". "Comienzan a coger esos trozos de mercado que antes estaban en manos de otros para seguir aumentando capacidad", añade.
Desde Ryanair confían en que seguirá creciendo: "Nuestra estrategia siempre será aumentar capacidad donde podamos y sea rentable, así como ofrecer las tarifas más bajas". Este año han abierto más de 406 rutas y nueve bases nuevas en su red. Ahora cuentan con 200 destinos y 455 aviones en flota, pero aseguran que esperan aumentar esa última cifra hasta los 600 en 2024, ese margen de cinco años en el que también prevé que las pequeñas aerolíneas desaparecerán.