El próximo jueves, 4 de mayo, el Banco Central Europeo celebra la tercera reunión de su Consejo de Gobierno este año para tratar asuntos relacionados con la política monetaria. Las dos anteriores se saldaron con otras tantas subidas del precio oficial del dinero de cincuenta puntos básicos cada una de ellas. El tipo de interés vigente en los países que comparten la moneda única es en la actualidad del 3,5%.
El Consejo de Gobierno de la institución que preside Christine Lagarde se reúne normalmente dos veces cada mes en su sede central en Fráncfort, aunque para tratar el rumbo de su política monetaria la toma de decisiones se realiza cada seis semanas. Las dos anteriores se desarrollaron el 2 de febrero y el 16 de marzo.
Las opiniones sobre qué sucederá el día 4 de mayo son unánimes: habrá subida de tipos. La única duda es saber si el BCE mantendrá su tónica de dureza, con una cuarta subida consecutiva de medio punto en el precio del dinero (la tesis del “no hay dos sin tres”, que reza la sabiduría popular española), o se decantará por un incremento más moderado, de 25 puntos básicos, haciendo felices a los partidarios del “a la tercera va la vencida”.
El euríbor es un indicador que suele ir algo por delante de las decisiones de política monetaria del BCE. Bajo este acrónimo sólo se esconde el “tipo de interés al que se prestan el dinero entre sí los principales bancos que operan en la Eurozona, tanto de países que tienen la moneda única como divisa, como de fuera”.
En mayo del pasado año, cuando faltaban todavía dos meses para que el Banco Central Europeo iniciara el cambio de rumbo de su política monetaria tras más de seis años con un tipo de interés del 0%, el principal indicador de los préstamos hipotecarios había pasado del -0,237% con el que cerró, como media, el mes de marzo, al 0,287%. Hubo que esperar a la reunión del 21 de julio de 2022 a que Lagarde moviera ficha y elevara el precio oficial del dinero de 0% al 0,5%. Desde entonces ha habido otros cinco movimientos al alza. El riesgo es que el euribor se dispare al 4,5%, acercándose un poco más a su máximo histórico.
Presión de la inflación
La presidenta del BCE está convencida de que “la inflación seguirá siendo demasiado alta durante demasiado tiempo” y no da signos al mercado de cuándo puede pisar el freno de su actual política monetaria. La inflación parece haberse relajado algo en el mes de marzo, últimos dato difundido por Eurostat, pero el euríbor está adelantando un nuevo endurecimiento de las condiciones de financiación.
El último indicador de inflación de la Eurozona correspondiente al mes de marzo señala que los precios subieron un 6,9% en términos interanuales, cuando en el mes de febrero habían crecido un 8,5%. No es un resultado para cantar victoria, máxime cuando en el conjunto de la Unión Europea la variación ha sido del 8,3%, frente al 9,9% del mes anterior. Es cierto que es la quinta bajada consecutiva de los precios, pero no hay más que retroceder al mes de octubre para encontrase una variación del 10,6%, o a noviembre, con una subida del 10,1%.
Hoy, el euríbor se mueve en tasa diaria por encima de 3,8% y en tasa media por encima de 3,722%. Los movimientos de las últimas semanas no son muy claros. A principios de abril se movió entre el 3,5 y el 3,6%, pero desde el pasado día 11 no ha dejado de subir, hasta acercarse peligrosamente al 4%, un nivel que traslada comparación homogénea al año 2007.
En el penúltimo episodio de tipos de interés al alza entre abril de 1999 y junio de 2000, apenas unos meses después del nacimiento oficial del euro como moneda común de once países, el precio oficial del dinero pasó del 3% (primer cambio del euríbor) al 4,25%, con el que se mantuvo hasta octubre de 2008. Una situación similar, aunque algo más acelerada, se está viviendo actualmente: el tipo de interés bajó al 0% en marzo de 2016 y ha repuntado desde julio del pasado año hasta el actual 3,5%.
Con el euribor en el 4%, en el año 2007, el precio oficial del dinero estaba fijado por el BCE en el 4,25%. Es el nivel más alto alcanzado desde la creación del BCE. Se acordó en la reunión del 3 de junio de 2000, tras aprobarse una subida de 50 puntos básicos. Presidía entonces la institución el holandes Wim Duisenberg, primer mandatario del BCE, ya fallecido.
El techo histórico del euríbor
El nivel más alto alcanzado por el euribor en su historia (nació con la llegada del euro sustituyendo al “mibor”) fue en julio de 2008, cuando se situó en media mensual en el 5,393%. El precio oficial del dinero en ese mes era del 4,25%, más de un punto porcentual de diferencia. Hasta en cinco ocasiones en ese año, el principal indicador de las hipotecas a tipo variable llegó a superar el 5%. Lo mismo que en el año 2000, cuando alcanzó el 5,248%. En esas fechas, el tipo de interés del BCE era el mismo, el 4,25%, que estuvo vigente desde el 3 de junio de 2000 al 8 de octubre de 2008.
El euríbor es la referencia de las renovaciones anuales o semestrales de la práctica totalidad de las hipotecas a tipo variable que están vigentes en España en la actualidad (el 75% del total). La variación en tasa anual entre los datos de marzo de 2022 (-0,237%) y marzo de este año (+3,647%) ha supuesto, según los expertos, un incremento mensual de cerca de 200 euros por cada 100.000 euros de préstamo. Una nueva subida de 50 puntos puntos básicos en el precio oficial del dinero podría tener gravísimas consecuencias para las finanzas de los hogares españoles.