La gestora de fondos del gurú español Francisco García Paramés se suma a la moda 'value' de ponerse largos en bancos. La caída de las cotizaciones de las entidades financieras la han puesto en el punto de mira de todos los profesionales de la inversión que buscas 'chollos' en la renta variable y es por eso que un sector como el financiero, prohibido durante mucho tiempo, se ha convertido en uno de los 'must' de las carteras más importantes del país.
Cobas Iberia, la estrategia nacional de Paramés, tiene invertido un 11,59% del patrimonio total en tres bancos: Bankia (2,3 millones de euros); Unicaja (2,4 millones de euros) y se ha incorporado este semestre CaixaBank (1,58 millones de euros). Por el contrario, el equipo de Cobas saca de su cartera a Mapfre.
El gestor estrella no es el único que ha sido seducido por las cotizaciones tan bajas. Sin ir más lejos, su antigua casa (Bestinver) también ha aumentado considerablemente su exposición al sector. En su cartera ya cuenta con cinco bancos, que representan el 11,12%, ligeramente inferior a la de Cobas.
Los bancos escogidos por el equipo de Beltrán de la Lastra son Bankinter (3,3 millones de euros); Unicaja (9,4 millones de euros); Santander (7,6 millones de euros); Bankia (1,8 millones de euros); y CaixaBank (6,4 millones de euros).
Esta exposición, que puede parecer ambiciosa, a priori, no es comparable con la que realiza José Ramón Iturriaga en sus fondos de Abante. En Okavango Delta, Kalahari y Spanish Opportunities, la exposición supera el 20%, siendo el último en el que más peso tiene, un 31,65%. Aunque después, en ninguna de las estrategia ningún valor bancario es de los cinco primeros.
Pérdida de valor de la banca española
Las heridas de la gran banca española siguen sin cicatrizar en el Ibex 35 tras siete años del rescate financiero. Los grandes bancos valen hoy 40.000 millones de euros menos en Bolsa de lo que lo hacían en el verano de 2012.
En este periodo, la banca ha conseguido remontar sus beneficios, pero los problemas de solvencia y rentabilidad siguen estando ahí, sobre todo, porque cada vez son mayores las exigencias del Banco Central Europeo(BCE).
Tampoco ayudan los grandes problemas reputacionales que ha tenido el sector. Y no sólo por escándalos de blanqueo de dinero, escuchas ilegales o pleitos de poder, sino por casos reales que afectan al ciudadano, como las cláusulas suelo, los gastos de las hipotecas o las preferentes.
