La última actualización de WhatsApp, lanzada el 22 de enero, solicita al usuario acceso al hardware de desbloqueo de huella digital.
Se trata de la tecnología que permite desbloquear el teléfono móvil al posar la yema del dedo sobre un pequeño sensor que se encuentra en la parte frontal o trasera del teléfono.
Hace unas semanas se hacía público el interés de la aplicación de mensajería por ampliar la seguridad de sus usuarios. Para ello quiere que sus usuarios tengan la opción de desbloquear funciones de la app a través de este método.
Se desconoce si la app permitirá desbloquear directamente la aplicación, determinados chats o ambas, pero lo cierto es que próximamente permitirá proteger más las conversaciones. La petición de acceso al hardware de lectura digital no hace más que confirmar este extremo.