Ya lo dice el refrán. Una cosa es predicar y otra muy distinta dar trigo. A la izquierda podemita se le llena la boca con conceptos como inversión pública. La realidad suele ser tozuda. José María González, el alcalde de Cádiz, al que se conoce popularmente como Kichi, es uno de los adalides del nuevo progresismo. Pero de boquilla. Desde que el nuevo equipo de gobierno tomó posesión, allá por junio del año pasado, las inversiones en obra pública han sido cero patatero (o casi).
El Ayuntamiento de Cádiz ha destinado sólo 150.000 euros a obra pública
La web municipal informa de tres expedientes de contratación del Ayuntamiento. Dos de ellos tienen relación con el proyecto de reurbanización de los patios interiores de la Barriada de la Paz, obra que lleva cerca de un año completamente parada. El primero asciende a 59.046,02 euros y el segundo tiene un presupuesto de licitación de 58.217,82 euros.
El tercer expediente es el proyecto de ejecución de suelo estabilizado en la plaza de la Reina, obra adjudicada por 32.550,39 euros. Entre los tres no llegan a los 150.000 euros, cantidad que se antoja ridícula.
Algo de mala conciencia debe tener el Consistorio cuando en el borrador del presupuesto para este año quiere destinar 2.932.241,75 euros para inversiones en Cádiz. Mejor para la ciudad.
Pero las primeras cuentas municipales del equipo liderado por José María González traen más sorpresas, como ya informó Vozpópuli, pues prevén un gasto de 575.703 euros en asesores municipales. Estamos hablando de un aumento de casi el 75% respecto a los 329.405 euros que destinó la popular Teófila Martínez en su último año al frente de la alcaldía.
