La crisis ha provocado desde hace tiempo que un aluvión de activos inmobiliarios haya salido al mercado en busca de comprador y, entre ellos, numerosos que llaman la atención principalmente por su singularidad. Es el caso de Isla Centinela, una ínsula de aproximadamente 10.000 metros cuadrados de extensión y que cuenta con un castillo en su interior, habilitado para celebraciones de todo tipo y también para hospedaje. Y lo más llamativo es su ubicación: en la provincia de Ávila.
Al estilo de algunas islas griegas, que el Gobierno heleno se vio obligado a poner a la venta debido a las dificultades financieras que atraviesa el país, Isla Centinela, situada en el embalse del Burguillo, se ha puesto a la venta a través de algunos portales especializados en el mercado inmobiliario de propiedades singulares, con un precio de salida de 3,5 millones de euros.
El principal atractivo de la isla es el castillo que tiene en su interior, construido a partir de una torre de vigilancia del río Alberche, que incluso es anterior a la construcción del embalse, en 1927. Cuenta con cinco habitaciones más la torre original, acondicionada también como dormitorio.
Explotada para uso turístico, la isla se alquila actualmente para fines de semana y está atendida por personal de servicio las 24 horas, incluyendo catering.
Se trata de una extensión de terreno que queda aislada aproximadamente la mitad del año debido a las crecidas de las aguas, temporada en la cual tan sólo es accesible a través del embarcadero con el que cuenta.
En temporada seca, la isla se convierte en península ya que emerge un brazo de tierra que permite su acceso a pie o con vehículo.
