Las restricciones a la movilidad impuestas en la Comunidad de Madrid para tratar de reducir el impacto de la pandemia afectan a todo tipo de colectivos, comercios, hostelería, empleados públicos... y también a la masonería.
Las '17 Respetables Logias' bajo la jurisdicción de la 'Gran Logia Provincial de Madrid' se han visto obligadas a suspender sus "trabajos masónicos" por las medidas extraordinarias anunciadas por la presidenta Isabel Díaz Ayuso.
La 'Gran Logia de España' informó el lunes que dichas medidas, en particular la limitación de reuniones a seis personas, impacta en sus "costumbres ancestrales".
Las 'Respetables Logias de la Masonería Española" requieren un mínimo de siete personas presentes para iniciar sus trabajos "de acuerdo con nuestros usos y costumbres ancestrales", explicó el lunes la Gran Logia de España.
La 'Gran Maestría' emitió el pasado mes de julio su propio decreto que permitió, tras decretarse el cese del estado de alarma, reanudar la actividad. Pero en la actualidad los trabajos masónicos están suspendidos "en tres de las ocho provincias masónicas".
Las logias de Madrid, Navarra y Murcia han suspendido sus trabajos por las limitaciones impuestas a reuniones de más de seis personas. La Gran Logia Provincial de Canarias también ha decidido suspender sus trabajos, aunque se permitan reuniones de hasta diez personas. Solo la Gran Logia Provincial de Andalucía es la única que no afronta restricciones al derecho de reunión en su territorio.
