El periodista, escritor y académico Juan Luis Cebrián es más que un hombre de letras. Lo es también de números, ya que se le dan muy bien las cuentas cuando se trata de sus finanzas personales. Por si fuera poco el dinero que se embolsó en 2011 como consejero delegado de Prisa -se llevó 8,4 millones de euros (6,2 en concepto de bonificación por vender parte de la empresa a Liberty)-, ganó otros 96.500 más como consejero de Mediaset España. De esta suma, 67.500 corresponden a la retribución fija del consejo más otros 29.000 en concepto de dietas de asistencia.
Los números de Grupo Prisa, sin embargo, no se le dan tan bien; son cada vez más rojos. La compañía cotizada perdió 451,29 millones de euros el pasado ejercicio, seis veces más que en el ejercicio anterior, mientras que la nómina de Cebrián crece de manera exponencial. Sin embargo, su retribución es millonaria: 8,4 millones de euros se desglosan de la siguiente manera. Un millón y medio de euros en metálico (300.000 euros en concepto de salario y 1,2 millones como “compensación extraordinaria por la refinanciación de la compañía”), otros 5 millones de euros por lo que se describe como el “éxito de la recapitalización de la sociedad” y otros 1,7 millones de euros en concepto de “compromiso de permanencia” para que siga en el cargo durante un periodo de tres años.
96.500 euros supone para el común de los mortales un sueldo millonario: más de 16.000 millones de las antiguas pesetas. Para Cebrián dicha cantidad es calderilla si lo comparamos con los casi 1.400.000 millones de pesetas que supondría su retribución de 8,4 millones de euros en 2011, unos beneficios personales que se fijaron el mismo año en que el grupo editorial afrontaba un ERE en la Cadena SER, un ajuste de empleo en los diarios El País y Cinco Días y en el que se sometió a su plantilla y equipo directivo a lo que se describió como un ajuste voluntario del 7% en sus nóminas.
Es, asimismo, poco dinero para el consejero delegado de Mediaset, Paolo Vasile, empresa que en 2011 ganó 110 millones de euros y de la que Cebrián se lleva la propina de 96.500 euros. Vasile, a pesar de manejar una empresa que logra beneficios, el pasado año ganó 1,2 millones de euros. Poco para las cantidades que maneja el fundador de El País.
