Solo unos minutos antes de que arrancara la comisión de plenario de Urbanismo del Ayuntamiento de Barcelona, la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau (Barcelona en Comú), y su socio de gobierno, Jaume Collboni (PSC) han comunicado a los partidos de la oposición que, aprovechando la sesión, se iba a suspender la concesión de nuevas licencias en el distrito tecnológico del 22@. La congelación de los permisos urbanísticos ha sido posible gracias a que el Grupo Municipal de ERC ha votado la urgencia de la medida, mientras que Ciudadanos, PP y Barcelona pel Canvi han votado en contra. JuntsxCat se ha abstenido.
La paralización de nuevas construcciones afectará durante los próximos cuatro meses a los solares que se encuentran sin edificación y sin proyecto aprobado, lo que representa el 21% del total del suelo del distrito, o lo que es lo mismo, casi una cuarta parte del mismo. Según la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz (BeC), la medida pretende tomarse un respiro “para poder replantear los usos urbanísticos y planificar la construcción de vivienda protegida, en respuesta a las demandas de los vecinos del distrito de Sant Martí”.
La maniobra del gobierno municipal ha indignado a los partidos de la oposición por el fondo de la cuestión y “por las formas” ha criticado el concejal adscrito al Grupo Municipal de Cs, Celestino Corbacho. Corbacho ha lamentado que los grupos se hayan enterado de la iniciativa “solo una hora antes” del inicio de la comisión, porque el punto no estaba incluido en el orden del día y después de meses de silencio e improvisación del equipo de la alcaldesa.
Inseguridad Jurídica para las empresas
El concejal del PP, Óscar Ramírez, se ha sumado a las críticas y ha advertido que la suspensión de licencias traerá consigo “inseguridad jurídica para las empresas". Ramírez ha subrayado lo insólito de la decisión porque el distrito 22@ “es un modelo de éxito” y que gracias a su singular ordenación “se revitalizado una zona industrial en decadencia y se ha favorecido la innovación y la construcción de hoteles y equipamientos".
También se ha mostrado crítico con el gobierno el concejal de JxCat, Jordi Martí, que ha acusado al partido de Colau y al PSC de provocar de forma innecesaria "intranquilidad e incertidumbre" entre "muchos sectores económicos de la ciudad" que estaban en plena ebullición, como el de la construcción de oficinas y sedes corporativas.
En la misma línea se ha posicionado el presidente del Grupo Municipal de BCN pel Canvi, Manuel Valls. Valls se ha mostrado sorprendido por “las prisas” de Colau para paralizar las licencias “cuando en Barcelona hace falta suelo para construir oficinas”. De hecho, las sospechas de que Colau iba a paralizar las licencias ya estaba provocando que los promotores optarán por empezar a construir edificios de oficinas en otras zonas de la ciudad, como el Eixample, como avanzó El Liberal.
El debate es necesario, pero las formas no son las correctas
La oposición se ha mostrado molesta porque “aunque es necesario abrir un debate”, han coincido varios concejales, no se pueden suspender las licencias de un día para otro y sin avisar. “Entendemos que se consulte a los vecinos sobre el futuro del distrito pero estas no son las formas”, se ha quejado Manuel Valls.
La propuesta de Colau y Collboni ha prosperado gracias a ERC, que sigue ejerciendo de tercer socio de gobierno en la sombra. La concejal republicana, Maria Buhigas, ha justificado el apoyo a la suspensión en que esta incluye “que esté acotada en el tiempo, en cuatro meses, que era una de las exigencias de ERC”. Buhigas ha añadido que “han pasado 20 años desde que se inició la construcción del 22@ y el contexto actual ha cambiado”. “Ahora lo importante es ver los márgenes de los que disponemos y dar respuesta a las necesidades y requerimientos de la ciudadanía con el máximo consenso”, ha concluido la edil republicana
Un portavoz municipal ha explicado que la suspensión de licencias pretende “dar cumplimiento al acuerdo firmado en noviembre de 2018 con los sectores económicos y sociales, el mundo académico y los vecinos” para adecuar el 22@ a “las nuevas necesidades”.
Incremento del suelo residencial y protección del Poblenou
Mientras los permisos de obra estén suspendidos, el Ayuntamiento de Barcelona aprovechará para “elaborar herramientas urbanísticas y nuevos planeamientos que permitirán aumentar la oferta de vivienda protegida a través de un incremento de la edificabilidad”, lo que acarreará que la reserva de suelo residencial pase del 10% al 30%. Además, “se favorecerá el desarrollo de nuevos sectores económicos y se conservará el tejido urbano tradicional del Poblenou”, han asegurado las mismas fuentes.
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