La Generalitat seguirá abriendo embajadas catalanas, según ha anunciado el consejero de Acción Exterior, Albert Bosch. El sucesor de Raül Romeva (hoy en prisión por sedición) al frente de la consejería ha asegurado que esta “acción exterior” es “legal, legítima y necesaria”. Bosch ha añadido que Cataluña está sufriendo un “auténtico ataque” por parte del Gobierno central, que vigila muy de cerca estas delegaciones para intentar evitar que denigren a España.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña suspendió cautelarmente la semana pasada las delegaciones catalanas abiertas en Argentina, México y Túnez. Algo que, según Bosch, es “uno de los ataques más graves que ha padecido la administración catalana desde el 155”. Bosch ha definido la actuación del Gobierno central en este sentido como “una cruzada contra la libertad de pensamiento y los derechos políticos del Gobierno de la Generalitat”.
Internacionalizar Cataluña
Albert Bosch ha asegurado al respecto que, “por más obstáculos” que ponga el Gobierno central, la Generalitat “no dejará de hacer el trabajo que nos ha encomendado la ciudadanía”. “Nos pueden poner tantas trabas como quieran”, ha dicho Bosch, “pero no evitarán que hagamos acción exterior”. El consejero se ha pronunciado sobre este asunto en la reunión anual que mantiene la consejería con distintos departamentos de la Generalitat para hacer balance del trabajo desarrollado fuera de Cataluña y de España. Un trabajo que, según Albert Bosch, seguirán llevando a cabo “para internacionalizar el país” porque “el 70% de la ciudadanía así lo reclama, según los datos del Centro de Estudios de Opinión (CEO)”.
El responsable de Acción Exterior catalán ha negado que las embajadas promovidas por los últimos gobiernos independentistas actúen contra España. Tienen, ha dicho, un objetivo “positivo” que es “internacionalizar Cataluña”. Y ha insistido en “el mandato” de los votantes independentistas “para estar presentes en el mundo y ser competitivos”.
Embajadas políticas
“No podrán evitar que cumplamos con nuestro deber”, ha insistido Albert Bosch, “que nadie dude de que seguiremos internacionalizando el país”. Y ha añadido: “Hoy certificamos esta voluntad y la necesidad de seguir trabajando por la acción exterior de Cataluña. Y lo haremos como lo hemos hecho siempre, desde todos los puntos de vista: económico, cultural, social y también político”.
El presidente Quim Torra aprobó el pasado mes de septiembre seis decretos con la finalidad de proteger estas delegaciones catalanas en el exterior. Fue su respuesta a la ofensiva del Gobierno central para intentar cerrar aquellas embajadas cuya actuación tenga como objetivo perjudicar la imagen de España en el exterior.